Hasta hace bien poco los cascos eran elementos de seguridad bastante rudimentarios: una carcasa más o menos dura con un interior algo más confortable. Gracias al avance de la tecnología ahora contamos con piezas de protección realmente avanzadas, repletas de elementos de seguridad, ventilaciones cada vez más eficientes, interiores muy cuidados y exteriores cincelados por el viento.
Eso no es nada con respecto a lo que está por venir. Las nuevas tecnologías aplicadas al mundo del motociclismo cada vez tienen sus bases más asentadas y cada día estamos más cerca de tener cascos de moto similares a un entorno de realidad aumentada. Pero NUVIZ va a ser pionera en los cascos 2.0, porque ya está distribuyendo su sistema en Europa.
NUVIZ, el primer acercamiento a los cascos inteligentes
Con parte de su sede en Estados Unidos y la otra en Finlandia, la start-up NUVIZ va a convertir el sueño de los motoristas más techies en realidad. Después de haber recibido una participación de 5 millones de dólares por parte de KTM, ahora sabemos que su innovador producto ya disponible en el mercado europeo.
En realidad no es un casco inteligente, sino un dispositivo que se acopla a la mentonera de nuestro casco e incorpora un visor HUD (Head-Up Display) que proyecta información sobre una pantalla próxima al campo de visión del piloto. Con permiso del fiasco de Skully (que ahora busca una segunda oportunidad en manos españolas) y las pocas unidades que repartieron, será el primer elemento de este tipo vendido públicamente en Europa.
Realizando la compra a través de su web, a cambio de un precio de 699 euros recibiremos sin gastos de envío un aparato que convertirá nuestro simple casco en mucho más. A través de la conectividad con Apple y Android y un mando inalámbrico que se coloca en el manillar podremos configurar la información que queremos ver en la pantalla.
Desde información del viaje hasta las indicaciones del navegador GPS, además de notificaciones, acceso a una cámara incorporada en la parte frontal, estadísticas de viaje, memorización de rutas favoritas, música...
Como de costumbre en estos casos, el acceso a más información tiene un doble filo. Si bien para algunas funcionalidades no hay que apartar la mirada de la carretera (aunque sí habrá que cambiar el enfoque de los ojos), el exceso de información o funcionalidades puede causar más distracciones de la cuenta.
En cualquier caso la tecnología debe seguir avanzando, siempre que lo haga en beneficio de la seguridad de los motoristas. Y este parece el camino porque otros como los mencionados Skully, Nolan con su N-Com ARX o CrossHelmet están haciendo apuestas muy similares.
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