Álex Rins: el matagigantes azul que amenaza a las leyendas de MotoGP
El Gran Premio de Gran Bretaña de 2019 ya está por derecho propio en los anales de la historia del motociclismo. Si la carrera de Austria ya fue trepidante, ésta de Silverstone la ha superado no por el número de adelantamientos en cabeza, que apenas hubo, sino por la infartante resolución de la carrera sobre la misma bandera a cuadros.
Álex Rins se ha doctorado en Silverstone exprimiendo hasta el límite y más allá las posibilidades de su Suzuki, que le daba un gran paso por curva pero prácticamente le impedía ponerse en paralelo con Marc Márquez por lo limitado de su motor. Al final, Rins engañó al campeón atacándole sobre la misma línea de meta por dentro, cuando en la vuelta anterior lo había hecho por fuera.
Marc Márquez podría ganar el título en Tailandia o Japón
El salto de madurez que está dando Álex Rins en la temporada 2019 está siendo gigante. Si ya en 2018 se demostró como un piloto de futuro, este año se consolida como uno de presente, y que con la moto adecuada podría estar peleando por el mundial. Rins es el líder que necesita Suzuki y un aspirante veraz a cada victoria.
Y es que la Suzuki sigue siendo una moto de fortalezas y debilidades muy marcadas. El chasis le hace volar en curva, pero la poca potencia del motor le ahoga en las rectas. Durante la carrera hubo momentos en los que parecía que estábamos ante un duelo de Fórmula 1, en el que el piloto de atrás tiene mucho más ritmo pero es incapaz de adelantar.
A Rins ya se le puede considerar por pleno derecho un piloto de élite dentro de MotoGP. En Austin le ganó el duelo por la victoria a Valentino Rossi y aquí lo ha hecho a Marc Márquez. Las dos mayores leyendas en activo de las motos han mordido el polvo contra el pistolero de Suzuki, que ya acecha el subcampeonato. Tan solo 23 puntos le separan de Andrea Dovizioso.
Ahora da más rabia recordar las dos carreras consecutivas en las que Rins tiró por la borda un buen puñado de puntos. En Assen iba líder y era el favorito para ganar, y en Saschenring prácticamente tenía el podio bajo el brazo. 45 puntos perdidos que ahora, quién sabe, le podrían dar alguna esperanza de campeonato.
Sin embargo la corona, salvo milagro inaudito, va a posarse de nuevo sobre la cabeza de Marc Márquez. El campeón se fue con sabor agridulce de Silverstone. Por un lado tiene el campeonato todavía más sentenciado, si es que eso es posible, pero por el otro volvió a perder un duelo por la victoria. Ya son trece derrotas en 18 cuerpo a cuerpo en MotoGP, y diez en los últimos once.
En cualquier caso, su temporada es despampanante. Acabado el mes de agosto sigue sin bajar del segundo peldaño del podio, con excepción única de la caída de Austin, cuando iba líder. Su ventaja ya es de 78 puntos y, quedando solo 175 en juego, en el equipo Repsol Honda ya podrían ir preparando el cava para Tailandia o, como muy tarde, Japón.
En parte dependerá del estado físico de un gafado Andrea Dovizioso, que se llevó un buen costalazo sin comerlo ni beberlo. Una vez más, el imán que tiene el de Ducati para los golpes hizo efecto en Silverstone. Fabio Quartararo se fue al suelo en la primera curva y Dovizioso no pudo hacer nada para evitarlo.
hadofhasdpkfhbaspdioufhaposdhfalsdhfadfjpsdofhjspdhjfsdlfjñasdhfpaoshdfpladnfpoadhjfpoidsjflasdnfadshfpoasdhjfpoijasdlfhnasñldvnkashjfoashjfladnslñfnasdñfhasdñljfhajdnfakñdsjbfñkdjhfañkdjsfn pic.twitter.com/tbAPOTELLr
— DAZN España (@DAZN_ES) August 25, 2019
La mala suerte de Dovizioso con este tipo de lances empieza a ser estadísticamente improbable, y esta vez nos dejó sin Ducati en la pelea. Porque Jack Miller lució el sábado pero pasó sin pena ni gloria el domingo, y Danilo Petrucci está completamente desdibujado desde que regresó de las vacaciones.
En cuanto a Yamaha, la sensación es de que progresan pero todavía les falta algo en carrera. También es cierto que nos quedamos sin ver a Fabio Quartararo, que era la moto de los diapasones más prometedora viendo el ritmo de los entrenamientos. Aún así Maverick Viñales y un rejuvenecido Valentino Rossi sacaron la cara por el equipo.
Quien no sacó lo hizo por el suyo fue, otra vez, Johann Zarco. El piloto francés no parece demasiado liberado después de haber roto su contrato con KTM. De hecho se llevó por delante a Miguel Oliveira y tendrá tres puestos de sanción en Misano. El portugués cada día brilla más y a nadie se le escapa que, si Dani Pedrosa no dice lo contrario, será el sustituto de Zarco en el equipo oficial.
Caso aparte es la situación de Jorge Lorenzo. El pentacampeón volvió a ponerse a los mandos de la Honda pero desde luego no exhibió demasiada velocidad. Es verdad que él alega que sigue dolorido, pero aún así es insostenible ver a la moto que va a ganar el mundial en manos de Márquez cerrando las tablas de tiempo.
Gracias a las caídas, al final Lorenzo consiguió puntuar. Y de hecho es cierto que en carrera tuvo algo más de ritmo que durante los entrenamientos, pero aún así es una imagen dura para todas las partes ver a un gran campeón como él luchando todo el fin de semana con Karel Abraham por no ser el último en las clasificaciones.