Personalmente llevo un tiempo haciendo experimentos para montar una micro-cámara en la Vespa y así tomar algunas imágenes cuando salimos en grupo los del club. Quizá por eso cuando veo un titular que incluye la palabra cámara pincho sin pensármelo a ver de que están hablando. Pero al leer esta noticia creo que al protagonista habría que dale un premio al motero con mala suerte y quizá otro a la torpeza.
El tema es que el motero se había comprado una cámara para grabarse haciendo carreritas con su moto por las carreteras, pero como no debe ser muy hábil la cámara se le cayó en un tramo. Hasta aquí la cosa parece normal. Nuestro motero patoso decidió volver al día siguiente a las mismas carreteras por las que había pasado a ver si recuperaba la cámara. Y de casualidad en uno de los tramos se encontró a la policía que lo pararon a preguntarle qué estaba buscando. Al contestarles que una cámara que había perdido el día anterior lo detuvieron y lo multaron por circular con exceso de velocidad.
La policía había encontrado la cámara y al visionar las imágenes para ver si identificaban al propietario se encontraron con una moto, una Triumph Daytona, circulando hasta a 177 km/h y cometiendo nada menos que 64 infracciones más en un vídeo de 50 minutos. Además las imágenes identificaban el modelo de moto y por los retrovisores se apreciaba el mono del piloto, todo coincidente con el detenido.
Sin duda el tipo se ha ganado a pulso el premio y las multas. Porque hay que ser bastante corto para además de ir cometiendo infracciones grabarlas y el colmo habría sido subirlas a You Tube para presumir de ello. En España a más de uno lo han pillado de esta manera pero al que nos ocupa no le ha dado tiempo ni de subirlo a Internet.
Vía | Bikes in the fast lane
Foto vía | Motorcycles.about.com