A lo largo de estos años hemos visto todo tipo de 'drag races' de lo más épicas. Pero quizá la de hoy no tiene precedente, y te lo resumimos rápidamente para que lo entiendas: Dani Pedrosa en una KTM de MotoGP, una Hayabusa de casi 400 CV y un Rimac Nevera de 1.914 CV.
La fórmula ya huele a éxito total, y no decepciona en absoluto. ¿Quién ganará? Bueno, sobre el papel tenemos un claro contendiente, pero allá se andará. Casi que lo mejor es ver a un piloto de MotoGP a grito pelado al volante del hiperdeportivo eléctrico que roza los 2.000 CV.
Duelo de CV a lo bestia
Carwow nos tiene acostumbrados a carreras de coches y motos de lo más espectaculares. De hecho hace no demasiado vimos a Dani Pedrosa enfrentarse a un Lamborghini de 1.000 CV en uno de sus capítulos.
Pues para esta edición el pequeño samurái vuelve a ser uno de los reclamos. Hasta la pista de un aeródromo lleva el 26 la KTC RC16 de MotoGP, y sus contrincantes no son precisamente menos... A un lado una Suzuki SuperBusa, y al otro, un Rimac Nevera eléctrico.
Por partes. A un lado del ring, Pedrosa y la KTM de la que ya conocemos algún detalle: "La moto tiene cerca de 270 CV de potencia, pesa 157 kg y tiene un motor V4 de 1.000 cc con un par motor de cerca de 120 Nm. Creo que mi mayor preocupación con esta moto es la tracción, pero con los dispositivos de control y la suspensión creo que no haré un wheelie", dice el 26.
Y su compañera de dos ruedas que casi dobla la potencia: una Suzuki SuperBusa, que no es más que una Hayabusa con turbo a la que hace poco se subió el hombre más fuerte del mundo en otra drag race épica. Alcanza la friolera de 370 CV de potencia, principalmente gracias al supercargador Rotrex C30-94, un importante cambio teniendo en cuenta los 180 CV que rinde el tetracilíndrico en línea de 1.340 cc de serie.
Y un coche de dos millones de euros. El Rimac Nevera es un hiperdeportivo eléctrico que roza los 2.000 CV. Otros datos: monocasco de fibra de carbono con el techo adherido y un bastidor auxiliar trasero de carbono, 2.150 kg, 2.360 Nm de par motor y dotado del avanzado All-Wheel Torque Vectoring 2 (R-AWTV 2).
Menos palabras y más acción. Las tres máquinas de matar se enfrentan a unas cuantas lanzadas y todas tienen un denominador común: la potencia del eléctrico, el arreo de la KTM y la desesperación de la SuperBusa. "Es porque tienes más tracción en los primeros metros", dice Dani.
Pero quizá que eso no sea el momento más épico, sino cuando Pedrosa, mono de motos incluido, se sube al coche eléctrico para flipar un rato ante los 2.360 Nm de par motor.
Podríamos escribir su reacción en forma de onomatopeya, pero lo mejor es que lo disfrutes por ti mismo: minuto 8:20 en adelante. "Increíble, es como...", es casi lo único que se atreve a decir el piloto probador de KTM cuando el coche se pone a 370 km/h (239 mph),