Ducati necesita la Panigale V4: Las bicilíndricas se hundieron en Inglaterra con todas sus carencias
Fin de semana para olvidar en Ducati tras la prueba del Campeonato del Mundo de Superbikes disputada en el circuito británico de Donington Park. Las monturas del equipo italiano suelen ser las que plantan cara a las Kawasaki de Jonathan Rea y Tom Sykes en cada cita mundialista pero esta vez no se mostraron demasiado competitivas.
No sólo el equipo oficial sufrió en el trazado inglés sino que el Barni Racing, equipo privado donde milita Xavi Forés, completó el peor fin de semana desde su llegada al campeonato con dos abandonos, uno en cada carrera por parte del piloto español.
Chaz Davies fue el mejor del fin de semana
Chaz Davies consiguió ir de menos a más a lo largo de la cita de Donington Park, comenzando con algunos problemas durante los entrenamientos que le llevaron a pasar por la Superpole 1 tras marcar tan sólo el décimo octavo mejor tiempo en los libres.
El piloto británico, que quería lucirse ante su público, logró pasar a la Superpole 2 pero luego terminaría saliendo en la tercera fila de la parrilla, siendo noveno. Durante la carrera trató de sacar la mejor versión de su pilotaje para sobreponerse a los problemas de la moto pero nada pudo hacer; finalizó en la misma posición en la que había comenzado.
Durante la segunda carrera sí que consiguió mejorar pero no lo suficiente para igualar el podio de la pasada temporada. Terminó quinto e incluso acabó por delante de la Kawasaki de Tom Sykes además de, como él mismo admitió, desear que lloviera para ver si podía acercarse al grupo de cabeza. Al final cayeron unas gotas, pero no las suficientes para frenar a lo más rápidos y el piloto de Ducati tuvo que conformarse nada más que con mejorar el resultado del día anterior.
Pese al mal fin de semana Davies se muestra contento con su actuación y ya tiene puesta la mira en la siguiente prueba: "A pesar de todo siento que he hecho una buena carrera. Tuve que forzar más de la cuenta el neumático para acercarme a las primeras posiciones pero no podíamos hacer más. Hemos aprendido cosas importantes para aplicar en Brno", explica el británico.
Marco Melandri trató de salvar los muebles en la segunda carrera
Para Marco Melandri la cita inglesa fue un desastre casi de principio a fin. El piloto italiano, que comenzó la temporada logrando un doblete en Australia, parecía demostrar así que el nuevo reglamento había favorecido un acercamiento a las Kawasaki pero más bien ese premio parece que se lo lleva Yamaha (al menos en circuitos del estilo de Donington Park).
Melandri, que además reconoce que no es uno de sus trazados favoritos, se clasificó directamente (aunque por los pelos) en la Superpole 2 en la que sólo logró ser décimo segundo. El inicio de carrear fue complicado entre tanto piloto y la falta de ritmo.
Por si fuera poco, la mala sintonía con la Ducati durante el fin de semana le llevó a terminar en el suelo y, aunque pudo volver a pista, sólo logró terminar vigésimo segundo y por lo tanto sin sumar ningún punto para tratar de pelear por el campeonato este año. En este momento va quinto en la general y Jonathan Rea le saca más de 100 puntos.
La segunda carrera fue algo mejor, a pesar de que la Panigale R le llevó a hacer una carrera muy física, según comentó posteriormente, debido a que la configuración hizo que resultara muy nerviosa y por tanto se moviera demasiado. Acabó undécimo, aunque no sirvió para que se quedase contento con el resultado.
Michael Ruben Rinaldi se quedó clavado en la parrilla de la segunda carrera
Todo parecía comenzar relativamente bien para Michael Rinaldi, el piloto del "Junior Team" de Ducati. Sus resultados no estaban siendo mucho peores que los logrados en el resto de la temporada, especialmente siendo un circuito en el que la montura italiana no siempre responde, lo que hacía ver que él sí estaba consiguiendo dominar a la complicada montura de Borgo Panigale.
Tras clasificarse como décimo quinto en parrilla, el piloto de Rimini admitió que habían dado un paso adelante durante el warm up y que esperaba una buena carrera. No lo hizo mal y logró ganar tres posiciones teniendo que pelear con pilotos como Leandro Mercado, Bradley Ray o PJ Jacobsen.
El problema del joven piloto de 22 años llegó en la segunda carrera, en la que tenía esperanzas de mejorar, cuando nada más apagarse el semáforo salieron todos los pilotos excepto él, que se quedó clavado en el sitio tras un fallo técnico de su Panigale R.
"Habíamos logrado el mejor resultado posible en la primera carrera. Fue una pena lo de la segunda porque habíamos mejorado bastante a lo largo de los tres días. Tenemos que aprovechar estas dificultades para mejorar y estoy seguro de que en Brno seguiremos mejorando", explicó Rinaldi.
Xavi Forés tuvo que abandonar las dos carreras
Sin duda el de Xavi Forés ha sido el peor resultado de la fábrica durante la cita de Gran Bretaña. Todo comenzó mal, con el valenciano pasando por la Superpole 1 por primera vez en toda la temporada tras unos libres muy complicados, en los que una caída acabó con todas sus opciones.
No pasó el corte, de hecho se clasificó con el vigésimo segundo mejor tiempo de 25 pilotos que hay en la parrilla, lo que le complicó las cosas desde el inicio de la prueba. Acabó decidiendo retirarse porque no era capaz de controlar la moto ni de avanzar.
Tras haber prometido a su equipo que lo daría todo para agradecerles el trabajo que estaban haciendo en la moto, el valenciano salió tratando de redimirse y de dar una alegría a su equipo. Comenzó muy bien, ganando hasta siete plazas en la primera vuelta pero los problemas volvieron y acabó volviendo al box antes a falta de 12 vueltas para el final.
Forés reconoce que sabían que podía ser una pista complicada para Ducati pero no hasta ese punto. Tampoco se mostró contento Marco Bernabò, el principal manager del Barni Racing, que no dudó en calificar el fin de semana como "el peor desde la llegada a Superbikes del equipo".
Tanto los dos pilotos oficiales como los dos privados pusieron de manifiesto con sus resultados que el fin de ciclo de Ducati es más que obvio. La próxima llegada de la V4 (con 214 CV y un par motor de 124,0 Nm a 10.000 rpm), esperemos que más pronto que tarde, se hace necesaria para que vuelvan a poder mostrarse competitivos en circuitos como el británico, que son cortos y con muchas sucesiones de curvas.
La falta de desarrollo en la Panigale R, que está cerca de la jubilación en la competición, deja a los pilotos con pocos recursos para afrontar situaciones que, aunque no se dan habitualmente, sí que les hace mostrar sus carencias en situaciones complejas. Además, si la V4 continua como la que utilizan en el Campeonato Nacional Italiano, les permitirá tener menos desgaste físico y más control sobre la montura, que ahora resulta difícil de manejar.
Fotos | Ducati Media, Barni Racing