Hay ciertas actitudes que sobrepasan lo legal, incluso lo moral. En el mundo del motociclismo, que puede parecer un mundo tranquilo, también hay 'enemigos' que son capaces incluso de decapitar pilotos. Literalmente.
Hay una táctica tan vieja como peligrosa: un cable de acero tenso para cortar el cuello a los motoristas. La última víctima lo ha denunciado en redes sociales, y es de bastante notoriedad: el piloto profesional Taddy Blazusiak.
Los cables de acero entre árboles son una trampa recurrente en los bosques
Da igual en España, que en Francia, Italia o Estados Unidos. La técnica de poner un cable de acero tenso entre dos puntos es ya muy vieja, y sigue azotando al mundo del offroad.
El objetivo es cortar cabezas, literalmente. Una táctica asesina orquestada por personas a las que principalmente molesta el hecho de que alguien haga enduro por el monte con las motos. Ya sea por el ruido o por el hecho de ir en moto.
La última víctima ha podido contarlo, afortunadamente, pero no solo se ha llevado un buen susto, sino también una herida de por vida. Es Taddy Blazusiak, entre cuyos títulos destaca el de campeón mundial de enduro. El Pecco Bagnaia o Marc Márquez del offroad.
El cable de acero es altamente peligroso si se tensa entre dos puntos. Los motoristas, al pasar a tanta velocidad, chocan contra él y caen en la trampa mortal. Cuando un cable de acero está tenso, su filo actúa como una cuchilla. Y desenlace fatal.
Taddy Blazusiak ha tenido la suerte de contarlo. El piloto polaco, durante un entrenamiento el lunes pasado en una zona boscosa de Girona, sufrió un profundo corte en su rostro a causa de uno de estos cables que estaba colgado entre dos árboles.
El escalofriante relato ha sido publicado por él mismo, acompañado de una foto, en las redes sociales. Empezó: "Estoy publicando esto para que toda la comunidad offroad sepa que hay gente por ahí que es lo suficientemente inestable como para herir intencionalmente a otros solo porque odian las motos. Así que esto es lo que me pasó, montando en un sendero de camino el lunes 11 de noviembre me golpeé con un cable que alguien colgó intencionalmente en el camino".
"Afortunadamente, de alguna manera lo atrapé en un ángulo en el que salía de una esquina y golpeó en mi hombro derecho y en mi pieza de barbilla y gafas, aunque si ese cable se desliza hacia abajo de la barbilla, en mi cuello, probablemente no estaría escribiendo esta publicación", continuó.
Su reflexión final es que, a pesar de que "todo está bien" después de haber sido intervenido por un cirujano plástico, es qué hubiera pasado si el cable "me lo hubiera encontrado directamente en el cuello. No puedo entender cómo alguien puede hacerle algo así a otra persona".
Pilotos y aficionados a las bicicletas y motos que practican cualquier modalidad de moto o bici al aire libre, mucho ojo. En España esta es una táctica habitual poner cables de acero atravesando árboles. Son varios los sucesos que se repiten año tras año a lo largo de toda la Península.
¿Legal o ilegal?
Sucediese el incidente en una finca privada o no, el caso es que el planteamiento ético y legal está sobre la mesa. Poner un cable de acero como trampa entre dos árboles deliberadamente, aun siendo en una finca privada, podría tratarse de un delito contra la integridad física, o incluso un homicidio imprudente si provoca la muerte (artículo 142 del Código Penal).
El artículo 385 del Código Penal prohíbe cualquier acción que origine un grave riesgo para la seguridad vial, incluyendo la colocación de obstáculos en la vía, aun si estas acciones tienen lugar en espacios privados abiertos al tránsito de vehículos. La jurisprudencia lo avala.