Al igual que su primera sutil aparición en teaser el pasado mes de mayo, la MV Agusta RVS se ha desvelado de forma completamente inesperada. Tomando la base de una Brutale Dragster 800 la firma de Varese ha desarrollado el primer modelo del departamento Reparto Veicoli Speciali (de ahí lo de RVS) en el que se dan la mano nuevas soluciones tanto estéticas como técnicas y mucha libertad para los diseñadores.
Buscando soluciones a su precaria situación financiera, MV Agusta con Giovanni Castiglioni al timón, ha decidido volver a apostar por un nuevo modelo limitado, exclusivo y distinto a lo que conocíamos hasta ahora dentro de la marca italiana. Posiblemente no sea ni el más barato ni sea lo más scrambler que te puedas encontrar, pero a nivel de distinción hay pocas motos que puedan igualar a la RVS que vas a ver a continuación.
MV Agusta RVS, exclusiva para coleccionistas
A nivel de diseño nos encontramos con que la característica pieza frontal y un tanto extravagante de la Brutale deja paso a un nuevo faro redondo de aspecto tradicional y que marca la tónica general de contraste retro-moderno en el resultado final de esta RVS. En el interior del faro nos encontramos unos grupos ópticos full LED con iluminación en curva que se apoyan sobre un doble faro adicional montado sobre el lateral derecho de la moto.
El toque distintivo del modelo se refleja en un nuevo icono estrenado de forma independiente. Se trata de una calavera con un ojo rojo que mira amenazante desde el guardabarros delantero, el asiento del pasajero y el depósito.
La MV Agusta RVS lucirá un aspecto diferenciado y diferenciador, gracias al empleo de nuevos accesorios como discos de freno delantero lobulados y ranurados, protectores de manetas, llantas Kineo de radios con neumáticos mixtos Pirelli MT 60 RS, un trabajo de pintura específico, semi manillares con retrovisores en las puntas y tapicería específica.
El peso final de esta especie de scrambler futurista a la italiana se ha rebajado hasta los 160 kg, 8 kg menos que el modelo de origen, gracias al empleo de materiales ligeros de forma intensiva como la fibra de carbono o el titanio.
El motor de tres cilindros y 800 centímetros cúbicos se ha revisado en profundidad y aparte de cumplir con la normativa Euro 4 es capaz de arrojar una potencia de 150 caballos a 12.800 revoluciones por minuto. Una cifra nada desdeñable para una moto que aspira a ser una scrambler, o lo que quiera que sea esta creación.
Como de costumbre y para maximizar el beneficio por cada unidad (de la que aún se desconoce el precio), MV Agusta producirá exclusivamente un número limitado de unidades, con su numeración tatuada en el chasis mediante CNC.
Cada una de ellas vendrá acompañada por algunos accesorios especiales como una funda específica, un certificado de originalidad, un tapón de depósito rápido, línea de escape de competición SC Project, una centralita específica y una serie de piezas realizadas en titanio.
Puede parecerte más o menos acertada, pero desde luego que es de esas motos que levantan expectación. ¿Hacemos una porra sobre el precio?