El campeonato del mundo de MotoGP está en juego. Jorge Martín, piloto satélite, se la juega ante Pecco Bagnaia, piloto oficial. Muchas voces dicen que sobre el papel ya hay un ganador, intuyendo que la salida del español de la órbita Ducati podría condicionar el apoyo de la marca italiana a él. Pero no.
Ha sido Gigi Dall'Igna quien ha tenido que salir a desmentir que Jorge Martín peleará en igual de condiciones con Pecco Bagnaia hasta el final. Y ese final será probablemente Cheste, otra vez, otro año más.
"Otra persona quizás habría podido tomar otras decisiones", justifica Dall'Igna
Diez puntos separan a Bagnaia de Martín a estas alturas de la película. Ya han pasado unos cuantos Grandes Premios desde que el español cerrase su fichaje por Aprilia tras el portazo de Ducati, pero eso no supondrá una merma de apoyo por parte de Borgo Panigale.
Dall'Igna, director general de Ducati Corse, ha tenido que salir a aclarar estos rumores en La Gazzetta dello Sport: "Los que dicen que no dejaremos ganar a Jorge Martín no conocen mi historial. Esto es un deporte y es justo que siga siendo un deporte. Para mí, debe ganar el mejor", dijo el ingeniero italiano.
Él está al cargo, y no será quien permita que eso pase. Ha ejemplificado que, en caso de no ser él quien llevase la sartén por el mango en la fábrica italiana, Martín sí podría haber visto mermado su apoyo. Pero no ahora: "Para mí debe ganar el mejor… Otra persona quizás habría podido tomar otras decisiones", justificó.
Tal es el nivel de apoyo que "ahora los pilotos comparten todos los datos, y el trabajo que hacemos en el box es exactamente igual para Jorge y Pecco", y que no es comparable la situación actual a la de cuando Jorge Lorenzo y Valentino Rossi compartieron box, por ejemplo. "Entonces había un muro", señaló. "Haré todo lo posible para que sea así hasta el final", verificó sobre sus intenciones.
Por cierto, un tema que tocó Dall'Igna fue su posible fichaje por Honda para levantar los cimientos de la marca japonesa, igual que hizo con Ducati hace ya casi una década. Confirma que tuvo la oferta encima de la mesa, pero que le tentó: "Poner en marcha una estructura lleva tiempo, y se necesitan las personas adecuadas para expresar ideas, conceptos y nuevas soluciones. Y esto no se hace de la noche a la mañana", sentenció.