Lo de Marc Márquez no ha sido llegar y besar el santo, como muchos creían. Ya lo ha dicho él. Calma y vueltas es lo que necesita el 93 para afianzar su ritmo sobre la Ducati Desmosedici.
Un afianzamiento ya palpable; si en Sepang estaba cinco décimas por detrás, en Losail la cifra desciende entre dos y tres. Tiene mucho que ver con su confianza en la moto, y las primeras caídas al manillar de la moto de Borgo Panigale.
Marc Márquez vuelve a divertirse encima de la moto
El escenario que nos ha dejado Qatar es bastante claro. Marc Márquez está más cerca de pelear, pero va a tener la competencia dentro de casa: la GP24 es una bestia recién nacida. El dato habla por sí solo: Márquez terminó 4º, a 0.3 del crono líder.
Un crono que ha compartido con su primera caída a lomos de la Ducati, justo cuando estaba protagonizando un simulacro de carrera a 20 vueltas. Pasó más de la mitad, cuando en la vuelta número 12 se fue al suelo. Contra todo pronóstico, esa puede ser una buena noticia para el de Cervera, o al menos él se lo ha tomado así.
Caerse de la moto ha sido verdaderamente pragmático para el 93: "Ha sido el primer día en en el que he subido la intensidad encima de la moto, el primer día en el que he dicho: ‘si me caigo, me caigo’. Y de hecho ha llegado la primera caída, pero tocaba. Era el último día de la pretemporada y tocaba subir este punto", ha dicho a DAZN.
La primera caída de Márquez se producía al término del test; el frío dominaba el asfalto y perdió el control en la cuarta curva del trazado qatarí. Ahora ya conoce un poco más el límite.
La referencia para Márquez está en "Pecco, Bastianini y Martín, que son los que tengo de referencia en la misma fábrica", y a quienes pone en el punto de mira de cara al GP, y comedido, dice que "aún estamos un poco lejos de estos tres o cuatro pilotos que están marcando la diferencia".
El cambio de mentalidad ya está en marcha: "Me estoy divirtiendo, que eso ya es importante. Estoy disfrutando", justifica, y también ve brotes verdes en los últimos días en Doha: "Hemos conseguido reducir esa distancia que teníamos en Malasia. Aún nos quedan dos o tres décimas que serán difíciles de bajar".
"Siendo realistas", continúa, "de momento estamos para luchar por el quinto o por el sexto, pero es muy relativo, porque luego llegas aquí en el GP, te cambia la goma en pista y te cambia todo".