Eso es precisamente lo que le sucedió a Terri Eames, una entrañable abuela de la localidad británica de Hartlepool que toda su vida había soñado con poder dar un paseo en una Harley-Davidson. Gracias una vez más al inmenso corazón motero, que en tantas otras ocasiones nos ha dejado ver su lado más solidario, Terri consiguió cumplir uno de sus mayores deseos en la vida.
Madre de 5 hijos y abuela de 11 nietos, la vida de Terri Eames se vio sacudida cuando comenzó su dura batalla contra una grave enfermedad. Sin embargo, en algunas ocasiones, esas batallas se pelean con más fuerza cuando alguien decide darte un extra de motivación. Y eso es precisamente lo que hicieron 110 moteros para ayudar a Terri y darle uno de los días más felices de su vida.
Cuando gasolina y solidaridad se unen para ayudar
La causa de esta inesperada visita multitudinaria fue el llamamiento que uno de los amigos de Terri hizo a través de las redes sociales. Consciente del duro momento que está viviendo su amiga, se armó de valor y publicó un post en las redes sociales pidiendo ayuda para conseguir dar una alegría a Eames. Pronto, Tony Hudspith recibió una respuesta que haría posible que Terri cumpliese su sueño de montar en una Harley-Davidson.
Los que contestaron a ese llamamiento fueron los miembros de Miles for Men, una asociación caritativa que pronto lo organizó todo para que 110 moteros llamasen al timbre de la abuela Eames y le regalasen una experiencia que aunque fuese solo por un rato, le hiciera olvidar todos sus problemas.
A sus 57 años, Terri por fin pudo cumplir su deseo, mostrándose tras ello inmensamente agradecida y feliz gracias a la solidaridad de sus compañeros de paseo: Ha sido fantástico. Montar en una Harley-Davidson ha sido uno de mis sueños de toda la vida y por fin he podido cumplirlo. Siempre me han encantado las motos y ahora he podido recorrer todo Hartlepool subida en una Harley-Davidson. No puedo creerlo, ha sido una gran sorpresa. No puedo dar las gracias lo suficiente a todos los que han ayudado para hacer esto realidad.