Rodar en circuito no es una barra libre para hacer lo que nos de la gana ni tampoco nos garantiza que vayamos a estar exentos de ningún peligro. Al contrario, entrar en una pista requiere de unas atenciones específicas y, además, de estar precavidos de posibles riesgos añadidos inherentes a rodar a alta velocidad en una pista cerrada.
El caso que vas a ver a continuación es lo más extraño y perturbador que hemos visto en mucho tiempo. Ocurrió en el circuito de Snetterton (Inglaterra), donde Josh Boyd disfrutaba de una soleada jornada rodando en un circuito en perfecto estado. Por desgracia, una casualidad le convirtió en el protagonista de un escalofriante accidente en cuestión de segundos.
Revisar el estado del material antes de salir a pista es fundamental
Una quilla desprendida de la Kawasaki ZX-10R amarilla que pasa junto a la cámara sale volando, con tan mala suerte que impacta contra la cabeza de Boyd. El golpe es tan fuerte que inmediatamente perdió el conocimiento mientras rodaba a más de 225 km/h. Debido al efecto giroscópico y la inercia, la moto de Josh mantuvo la línea recta con su cuerpo inerte aún sobre la moto.
Haciendo una trayectoria oblicua a la de la pista, la moto de Boyd cruza desde el lado izquierdo hasta el derecho, se sale y acaba impactando contra las protecciones laterales. Justo antes de pisar la hierba el piloto cae al suelo y acaba deteniéndose sobre el lateral.
Por suerte para todos, ni Josh ni ningún otro participante de la rodada salió herido. El piloto no recuerda nada de lo ocurrido aparte de despertarse en el hospital con la mirada algo borrosa y viendo colores diferentes por cada ojo. Menos fortuna tuvo su BMW S 1000 RR, que quedó completamente destruida después del golpe.
Quizá él no lo recuerde, pero el vídeo no miente. La seguridad es lo primero también en el interior de un circuito y es fundamental asegurarnos que tanto nuestra motocicleta como nuestro equipamiento están en condiciones óptimas para salir a pista.
Una deslizadera, una quilla o cualquier pieza desprendida puede provocar el accidente de un compañero. Así que ya sabes, entre tanda y tanda recuerda revisar apropiadamente el estado de todo el material, y si algo no te da confianza la cinta americana hace milagros.