El 'holeshot' tiene en pie de guerra a MotoGP. El sistema que balancea la altura de la moto en movimiento ha generado mucha polémica desde que Ducati y Gigi Dall'Igna, y a pesar de que ya todos los equipos lo utilizan, aunque cada uno a su manera, sigue en el ojo del huracán. En Losail hubo muchas presiones.
Durante el Gran Premio de Catar se realizó una reunión de la MSMA en la que todos los fabricantes salvo Ducati estuvieron de acuerdo en legislar contra el 'holeshot'. Pero la marca de Borgo Panigale no está dispuesta a renunciar al artilugio que llevan tantos meses evolucionando. Se avecina tormenta.
Según KTM, los frenos de Brembo ya están al límite
Lo que alegan el resto de los equipos es que estos dispositivos ponen en peligro la integridad física de los pilotos, no solo por lo complejo de su accionamiento sino porque ha aumentado la velocidad media, también en paso de curva, haciendo que las escapatorias de los circuitos queden desfasadas.
Pit Beirer, el director del equipo KTM, fue incluso más allá explicando que "Brembo nos ha informado por escrito de que los frenos ahora están absolutamente al límite. En este caso, ni siquiera necesitamos hablar sobre los dispositivos de regulación de altura, no tiene sentido que le pongamos más ayudas técnicas a la moto para lograr aún más velocidad máxima".
Ducati por el momento se niega rotundamente a deshacerse de su tecnología, y menos aún a mitad de una temporada. Si MotoGP decide prohibirlo, tendrá que ser con tiempo de maniobra, pero a mitad de año Ducati se niega. Las declaraciones de los pilotos también fueron muy beligerantes.
El más rotundo fue Marc Márquez, quien opinó que "el 'holeshot' es algo que habrá que quitar en el futuro, pero para ello tenemos que ir todos juntos los pilotos porque los fabricantes quieren siempre más, más y más y no es posible. Además, no llega a las motos de calle, así que no tiene sentido para el futuro".
El catalán alega que además estos dispositivos han empeorado el espectáculo, una línea en la que también van los dos últimos campeones de MotoGP, Fabio Quartararo y Joan Mir. Para 'El Diablo', todo esto "empieza a ser demasiado. Al final vas más rápido, pero tienes que estar pendientes de muchas cosas que no son pilotar".
Mir ponía el foco en que "marcar diferencias entre pilotos es más difícil si todo es tan fácil. Pronto iremos a 370 km/h y vamos a tener mayor rendimiento, pero como dice Fabio son demasiadas cosas. Quizás no sea lo mejor". Es el primer episodio de un culebrón que promete tener muchos episodios en 2022.
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