Las bicicletas eléctricas parecen haberse convertido en una de las apuestas ganadoras de la nueva movilidad junto a los patinetes eléctricos. Son vehículos ligeros, compactos y perfectamente útiles para los movimientos de última milla y es por lo que el interés por parte de los compradores está subiendo.
Los movimientos políticos realizados durante la desescalada de la COVID-19 han hecho un flaco favor a los vendedores de bicicletas, que han visto incrementadas sus ventas. La atención en el mundo de las e-bikes la marca el precio y las alternativas más económicas suelen tener una buena aceptación en el mercado. La empresa estadounidense Rad Power Bikes propone el modelo RadMission con un precio de partida en de 885 euros.
Las bicicletas eléctricas y la barrera mental de los 1.000 euros
El precio de las bicicletas eléctricas no suele ser bajo y respecto a sus alternativas convencionales, la brecha económica es importante. Existen dos cifras económicas que marcan barreras mentales en el comprador, 500 euros y 1.000 euros. Para las bicicletas eléctricas se opta por la segunda.
Los fabricantes de bicicletas eléctricas son conscientes de que existen muchos potenciales clientes que buscan un modelo sencillo, sin grandes pretensiones pero sin grandes faltas y sobre todo resolutivo para los trayectos del día a día. Estas demandas suelen coincidir con un presupuesto límite que siempre es de tres cifras.
La empresa Rad Power Bikes, que actualmente tiene presencia en Europa y también en su mercado local, el estadounidense, ha lanzado el modelo Radmission, una bicicleta eléctrica de corte sencillo y un precio que parte en Estados Unidos de los 885 euros al cambio. Tiene una única velocidad, monta frenos de disco y se sirve de un motor con una potencia de 500 W. La batería es compacta y pesa algo más de tres kilogramos. Todo ello le otorga una autonomía con una sola carga de 70 kilómetros.
Una bicicleta para los que ya no necesitan un automóvil para sobrevivir
En la presentación del nuevo producto hablaron los máximos responsables de la empresa Rad Power Bikes, Mike Radenbaugh y Ty Collins.
El primero destacó la sencillez de manejo de la bicicleta al tratarse de un vehículo de corte simple, "se maneja igual que las bicicletas que solía montar cuando era niño, las ruedas más estrechas ayudan con esa sensación".
Mientras, el otro co-fundador de la compañía, Ty Collins, recalcó el carácter urbano de la nueva bicicleta y el enfoque de cliente que esta tiene. "Está pensada para esas personas que se están dando cuenta del hecho de que ya no necesitan un automóvil para sobrevivir" dijo Ty, quien también subrayó el cambio en el paradigma de la movilidad que supone usar este tipo de vehículos, "bicicletas como estas pueden llevar a alguien del punto A al punto B, reducir las emisiones, ahorrar dinero en gasolina y, en última instancia, cambiar todo el juego del transporte".
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