El Althea BMW Racing del Campeonato del Mundo de Superbikes en el que milita Jordi Torres, ha completado dos días de test en el Circuito de Jerez con el fin de poder mejorar el feeling con la moto y probar nuevas configuraciones que, durante el fin de semana de carreras resulta imposible por la falta de tiempo.
En concreto Jordi Torres y su compañero Markus Reiteberger además del Raffaele de Rosa (piloto de Althea en STK1000) han estado rodando tanto el martes como el miércoles. Por desgracia el alemán no ha podido hacerlo tanto como hubiese querido fruto de dos caídas que, al menos, no ha tenido consecuencias físicas.
Ayer pudimos rodar desde la una hasta las seis de la tarde. Estuvimos haciendo pruebas de geometría y cambiando las longitudes de la moto para ver qué sensaciones e información nos daba. Es importante porque durante los fines de semana hay poco tiempo y este tipo de pruebas no se pueden hacer. Así nos podemos anticipar a las reacciones de la moto cuando vayan surgiendo problemas durante un fin de semana de competición.
Hoy hemos probado unos links para la parte trasera, porque todavía se mueve mucho. Se han probado varias soluciones diferentes y la hemos hecho más estable. ¡De hecho, he podido derrapar, he podido hacer curvas y salir con la moto cruzada, que es algo que hasta ahora era imposible! Ayer mejoramos el apoyo del tren delantero y podía trazar con más angulos, pero nos hubiera ido bien un día más de test porque cuando mejora una parte empeora la otra, aún no hemos conseguido un buen equilibrio.
Veremos si estos cambios le permiten a Jordi Torres estar más cerca de los de delante en la próxima cita del mundial de Superbikes que tendrá lugar en Holanda en unos pocos días.
Vía | WorldSBK
Foto | Althea BMW Racing