Las motos de gasolina están más vivas que nunca. El sector y la industria están viviendo una época dorada que se puede explicar de muchas maneras. Pero quizá la mejor sea fijarse en la feria de motos más grande del mundo, el EICMA de Milán.
Habiendo cerrado su última edición, se pueden sacar muchas conclusiones. Muchísimas. Y lo mejor es que solo hay que fijarse en dos datos: en todos los stands y la gente que se ha pasado por allí.
Las motos, récord en todo este 2024... Y lo que está por venir
Hay ciertas lecturas que son evidentes. Las motos eléctricas no parecen vivir su mejor momento, al menos eso es lo que dan a entender los últimos cierres de empresas importantes. Otras grandes marcas como KTM están en crisis. Pero eso son minucias en comparación con el panorama general.
Y el EICMA es la mejor prueba. La feria EICMA de Milán hizo récord de asistencia. ¿Es importante? Es importante. Mucho. Vaya que si lo es. Y se explica solo con un par de datos: esta fue su 81ª edición, pero en verdad lleva celebrándose unos 110 años desde que abrió sus puertas por primera vez.
Pues justamente este año han batido récord de asistencia: 600.000 personas de todo el mundo pasaron por allí para ver todo lo que la industria aguarda: motos de gasolina, eléctricas, cascos, guantes, airbags. Todo. Y no un récord por la ley de la mínima, porque lo han batido por 40.000 más.
Casi más importante es el otro récord, el de expositores. Según la EICMA, hubo más de 770 expositores presentes en el evento, que representaban a 45 países y 2.163 marcas. Y si no estuviésemos en una época dorada, nadie estaría interesado en vender. Y todos los que estaban allí tenían ese objetivo.
Esto no significaría nada si dentro no se enseñan cosas que valgan la pena; que a la industria le interese. Y vaya que si lo han hecho. Las motos que se han presentado allí este año suponen el revivir de una industria que hace unos años y con motivo de la pandemia, estaba dolida.
Y si nos fijamos en el solo ejemplo de España, nos vale. Solo en 2024 casi todos los meses (menos uno) se han superado las cifras respecto a 2023, según ANESDOR. Se han vendido más de 182.535 motos, lo que es un 5,6% más respecto a la misma fecha respecto al año pasado.
En cuanto a coches, aunque la cifra no es comparable, el acumulado es de 744.698 unidades. Sí, es un aumento del 4,7% respecto al año anterior, pero sitúa un 23% por debajo de 2019, previo a la pandemia.
Hablemos de modelos presentados, porque las marcas han innovado de lo lindo. Han vuelto las deportivas; las trail siguen en todo lo alto; la movilidad urbana sigue siendo importantísima... Pero que las motos grandes y para el A2 copen casi todo el espectro es importantísimo. Y los chinos, que vienen muy fuertes. Tan fuertes que fueron los que más presencia tuvieron, y más modelos presentaron.
Menudas novedades. Solo por citar algunas bestias: la KTM 1390 SUPER DUKE GT, la 990 Duke R, la Yamaha R9, la Bimota KB 998, la Aprilia RSV4 Factory, el regreso de las Suzuki DR-Z4, la Ducati Panigale V2, el motor V3 de Honda... ¿Sigo? No hace falta. Lo que se ha presentado allí es una barbaridad. En potencia, en aerodinámica, en innovación. Y si la industria no estuviese en su apogeo, las marcas no se atreverían a tanto.