La historia entre Ducati y Marc Márquez promete dar mucho que hablar durante los próximos años. Los rumores que vinculan a la casa de Borgo Panigale con el piloto español hace tiempo que son muy fuertes, y más desde que Álex Márquez fichó por Gresini Racing de cara a la próxima temporada.
Sin embargo, de momento parece que el interés es mayor por parte de Márquez que por el lado de Ducati. Mientras que el español va dejando pildoritas sobre un posible cambio de marca, en Borgo Panigale descartan un posible interés en Márquez, aunque sí hablan de otro piloto al que quisieron fichar.
De momento, Ducati no ha pensado en fichar a Marc Márquez
Ha sido Paolo Ciabatti, el director deportivo de Ducati, quien en una entrevista con GPOne ha analizado cuál es ahora mismo la postura de Ducati respecto a Márquez, además de cuál han tenido en el pasado. Y la sorpresa es que, según sus palabras, nunca han intentado vestir a Marc Márquez de rojo.
"Nunca hemos intentado fichar a Márquez seriamente. Nosotros nos limitamos a husmear y poco más", comentaba Ciabatti. Los italianos, más que ir con todo a por la contratación de Márquez, han intentado crear incertidumbre en torno a la relación del piloto español con Honda. Un incordio.
Las declaraciones de Ciabatti se contradicen con las que hizo Davide Tardozzi, el director del equipo Ducati, hace solo unas semanas. El italiano abiertamente contó que esperaría a que Álex Márquez le hablase bien de la moto a su hermano, y después se acercaría a él para tentarle con un futuro ducatista.
Lo que más ha llamado la atención de las palabras de Ciabatti es que confiesa que Ducati sí que estuvo interesada en un piloto español muy talentoso, pero no es Marc Márquez: "Sí fuimos a buscar a Maverick Viñales, pero él no quiso", explica Ciabatti. Cómo hubiese cambiado la historia de Viñales vestido de rojo.
Se refiere Ciabatti al mercado de fichajes que se abrió de cara a 2021. Ducati tentó a Viñales para que dejase Yamaha y fichase por ellos de cara a la temporada 2021. El español llegó a tener la oferta casi aceptada, pero le dio un ultimátum a Yamaha, en Japón lo aceptaron y Viñales firmó una nefasta renovación por dos años que solo duró seis meses.
Lo que pasa fuera de la pista en MotoGP es casi tan importante como lo que ocurre dentro. Y probablemente Viñales se arrepienta de dejar pasar ese tren.