¿Realmente que lleva a un actor de éxito que cobra una millonada por actuar en películas a probar para una revista un puñado de motos de campo? Pues la respuesta es fácil, el olor a limpio del desierto al amanecer, la satisfacción de hacer un trabajo bien hecho y ajustar una moto para que funcione perfectamente. Estas palabras las dijo Steve McQueen a Herbert Shuldiner, editor de Popular Science cuando realizaron una entrevista y prueba de motos de campo por el famoso actor en 1966. Steve McQueen era famoso por su afición a las motos, llegando a participar en muchas competiciones del tipo de los ISDT en Alemania ya en 1964. Pero su máximo exponente lo alcanzó al ayudar a crear la Rickman-Metisse, de la que os hablamos no hace mucho en Moto22.
En esta ocasión McQueen estuvo probando motos tan dispares como una BSA Hornet, la propia Metisse, una Triumph Bonneville, una Honda Scrambler 450, una Greeves Challenger y una Montesa La Cross. En la lista también estaban la BMW R60, la Harley Davidson Sprint, la Suzuki X& Scrambler y la Yamaha Catalina 250, pero estas motos no pudieron ser probadas a fondo por problemas de tiempo con la agenda de McQueen.
Recordemos que en 1966, las motos de Trial todavía no habían sufrido la evolución que les provocó la entrada de motos españolas como las Montesa Cota o Bultaco Sherpa, así que todavía se utilizaban las pesadísimas mecánicas inglesas de cuatro tiempos. Las suspensiones y los chasis estaban bastante evolucionados, pero al tener que lidiar con tantos kilos de más se veían muy limitados a la hora de evolucionar por el campo.
BSA Hornet
Esta moto se diseño para su uso en el desierto o Scrambling, como se conocía el Moto Cross. Propulsada por un potente motor de 650 cc equipado con un buen filtro de aire. Steve comenta la necesidad de un buen filtro de aire para cualquier uso de la moto en condiciones de polvo o suciedad. Sobre esta moto Steve comenta que la encuentra demasiado pesada y comenta que debería pasar por una buena cura de adelgazamiento para ser mas competitiva, igual que dice que la moto tiene una mala tendencia a seguir su propia trayectoria, siendo bastante poco manejable. Esto seguramente mejoraría con un mayor ángulo de avance en la horquilla delantera.
Rickman-Metisse
Catalogada como una auténtica moto de TT, con ruedas de tacos esta Metisse va propulsada por un motor de 750 cc que llega a los 60 CV. La principal pega que destaca McQueen es su limitación en la altura libre al suelo, aunque el recorrido de las suspensiones es de algo más de 190 mm. Sin embargo esta es la niña mimada del actor, y destaca que incluye soluciones tan innovadoras en su momento como el uso de los tubos del chasis como depósito de aceite (lo que mejora su refrigeración) o las horquillas Ceriani sobre tijas artesanales.
Triumph Boneville
La moto preferida de Steve McQueen hasta que empezaron a aparecer las motos más ligeras. De todas maneras esta Triumph era la moto más laureada de la época. La moto que probó era una de las nuevas versiones en las que la caja de cambios estaba integrada ya en el cárter. La horquilla delantera también necesitaba algún refinamiento, pero en cuanto se ajusta es terriblemente efectiva, muy cerca de la horquilla Ceriani. McQueen comenta que este motor utiliza dos carburadores, lo que significa que tiene dos cables de gas y que esto es otra pieza extra a la hora de poder averiarse. Pero es sin duda una de las mejores motos Off Road de su época, por prestaciones del motor, por chasis y por su geometría de suspensiones. Todo esto a pesar de tener una instalación eléctrica de poca calidad, algo que era muy habitual en los sesenta.
Continuará.....
Vía | 8 Negro; Knucklebuster
Imágenes Vía | Vintage Bike; Motorbikes Search; IJMS
Más información | Steve McQueen en Wikipedia