
A ningún español se le pasó lo que sucedió ayer: el gran apagón, que ya llaman. Y no se le pasó por motivos obvios. Las ciudades retrocedieron años: semáforos aniquilados por el apagón; cruces que parecían más bien un campo de batalla; peligrosos pasos de cebra y vías completamente atestadas y atascadas de tráfico.
¿Y la reina? La moto. Con una velocidad media de dos kilómetros por hora en las autovías y menos aún en las calles, las grandes ciudades colapsaron. Mientras, las motos tenían un truquito que la convirtieron en la reina de la carretera: el filtro de carriles.
La solución tuvo nombre y apellidos: filtrado entre carriles. Legal, con condiciones
El caos se apoderó de todo ayer. Aeropuertos, estaciones de autobús, de tren... Y de las carreteras también. Solo hubo que echar un ojo a las principales vías de la capital, como la M-30 y la M-40, que quedaron completamente colapsadas y bloqueadas. Hasta el Ayuntamiento decidió cerrar por seguridad los túneles de la M-30 en ambas direcciones, donde había centenares de coches atrapados.
Según recoge El Mundo, las colas llegaban hasta el punto de hacer medio kilómetros en 20 minutos. En Barcelona, según El Periódico, se llegaron a registrar hasta 50 kilómetros de retenciones en las principales arterias que rodean la capital catalana.
Ahora la Dirección General de Tráfico ha pedido expresamente evitar circular "si no es necesario" tras el apagón. En el caso de tener que desplazarse, la DGT recomienda conducir con precaución y extremar los cuidados hasta que se restablezca la normalidad en las vías.
Ante semejante situación, la moto recobra sentido. Tiene vida. Entremedias de semejantes colas apocalípticas, la moto sirvió ayer como elemento de escape, de viabilidad. Y el motivo tiene nombre y apellidos: el filtrado entre carriles.
Mientras todos se quedaban atascados en kilométricas colas, las motos filtraban cómodamente entre los coches. Porque además, es que es legal. Pusieron de manifiesto la agilidad y utilidad de la moto en la ciudad, pero al máximo exponente además.
Con el Reglamento de Circulación en la mano, se puede filtrar. Si vamos al artículo 84.5 del Reglamento, leemos: "El conductor de un vehículo de dos ruedas que pretenda adelantar fuera de poblado a otro cualquiera lo hará de forma que entre aquél y las partes más salientes del vehículo que adelanta quede un espacio no inferior a 1,50 metros". Incumplirlo es una infracción grave con multa de 200 euros.
No se puede filtrar fuera de poblado. Sin embargo, dentro de núcleos urbanos, sí que se puede. Con una condición: se puede filtrar en moto en atascos o tráfico detenido, siempre con seguridad. Por el arcén, ni pensarlo, de momento, porque la DGT está trabajando en hacerlo legal a lo largo de este 2025, o 2026 como máximo.
Es decir, que sí se permite que las motos o "vehículos de dos ruedas" adelanten a los coches parados en vía urbana. Da igual si se trata de un semáforo en rojo o un atasco, pero siempre con la "máxima seguridad" y "sin invadir carril contrario". Si a juicio del agente esto no se cumpla, la infracción es grave, con retirada de seis puntos del carnet y 500 euros de multa.
Imágenes | Motorpasión Moto, MCN