Por que pocos han sabido entretenernos tanto aunque sea sólo dando una par de vueltas en los entrenamientos, por que sólo tú has sabido hacer correr de verdad a la Desmosedici, por que siempre has puesto una sonrisa cuando te has bajado de la moto, por que has reconocido la victoria de tu contrincante cuando ha sido más rápido y, sobre todo, por haber hecho que más de uno en Ducati se arrepienta de dejarte escapar.
Ni una primera temporada dura en MotoGP en el equipo de Lucio Cecchinello – el bayeta te llamaban – , ni los problemas de salud que te apartaron de los circuitos en 2009, ni las malas artes de tus jefes que te traicionaron cuando tuvieron la oportunidad lograron acabar con un piloto tan espectacular y a la vez competitivo como tú. Supiste levantarte de una jugada sucia merecedora de tarjeta roja y enseñar al mundo que en ocasiones es el piloto el que doma la máquina.
Y sí, de tarjeta roja. Un equipo que encuentra la pieza que encaja a la perfección para llegar a lograr el título de campeones del mundo no se puede permitir dejar de tenerla en cuenta por haber tenido una mala temporada o por que la salud en ese momento tan duro no le acompañaba. Pero te felicito, lograste reponerte y seguir haciendo tu trabajo como el profesional que eres. Y es que, si hay algo que me ha gustado de este final de temporada en Cheste, han sido las caras que se veían en el box de Ducati cuando lograste la pole; alegría mezclada con un profundo sentimiento de culpa inundaban los rostros de todos los presentes que parecían preguntarse cómo han podido deshacerse de un piloto con tanto talento.
De un piloto que corría cada carrera tan cerca del límite que en ocasiones, en los vértices de las curvas, daba la sensación de estar en el suelo pero que rápidamente levantaba la moto para dar gas sin contemplaciones regalándonos unas derrapadas dignas de permanecer inmortales en el mejor de los museos. Un estilo increíble que no se cansa de revindicar que el control de tracción y la electrónica están cavando la tumba de nuestro amado deporte.
Loris Capirossi, Carlos Checa, Troy Bayliss, Sete Gibernau, Marco Melandri o Nicky Hayden han sido algunos de los que han intentado hacerse con la máquina indomable que hiciste campeona en tu segundo año en la categoría, algo que sólo está al alcance de un auténtico crack. Ahora viene a sustituirte Valentino Rossi, por que los que eran tus jefes saben que sólo un piloto que pasa por ser el mejor de la historia del motociclismo puede llegar al listón que les has dejado. Por que cada pole, cada vuelta rápida y cada cajón del podio que has conseguido este año parecía mandar un mensaje directo a Ducati; ¿seréis capaces sin mí?. Y está por ver, por que mientras Valentino salió a pasearse con su nueva moto tu has salido como el piloto más rápido de los tests de Valencia.
Por todo esto, desde aquí, te deseo toda la suerte que te faltó en su momento. Espero que vuelvas a hacer que Italia entera se arrepienta de perderte y te agradezco que nos hayas hecho disfrutar tanto del mundo de las ruedas. ¡Gracias Casey!
Fotos vía | Ducati Corse