Conducir bebido cualquier vehículo es una inconsciencia que puede resultar muy cara y lo malo es que no solo el descerebrado capaz de ponerse a conducir en este estado, es el que puede salir perjudicado. Toda esta situación se agrava aún más cuando el conductor borracho lo hace sobre una moto. Por supuesto conducir en este estado una moto donde es fundamental guardar el equilibrio, resulta incluso cómico dependiendo de la “tajada” que lleve el insensato. Ojala todas las caídas e incidentes fueran así, como el vídeo que nos ha mandado Mcharly, pero lamentablemente esto no es lo habitual.
Lamentable verdad. Pues tened cuidado en estos días en los que con tanta celebración se nos puede ir la mano con el alcohol, aunque espero que no hasta este extremo. Y si tenéis pensado beber, por supuesto dejad la moto en casa. Pero no solo la moto, el coche también va a estar mejor aparcadito junto a la moto.
Gracias Mcharly por la pista.