Ducati Scrambler, rodando por Barcelona
Ayer nos quedamos saliendo del local en el que nos hablaron de la filosofía de la Ducati Scrambler, del público hacia el que va dirigido y su posicionamiento en el mercado. Hoy vamos a hablar de cómo se comporta dinámicamente la moto. Aunque los escasos cien kilómetros que hicimos no dan para mucho, si que son suficientes para quedarnos con lo importante.
Ducati ha fabricado una moto apta para todos los públicos. Fácil de conducir, amigable con el piloto además de contar con una imagen muy personal que ayudará a reconocerla allí donde vaya, algo como pasó con la Ducati Monster, pero en el siglo XXI. Veamos lo que nos encontramos nada más subir a ella.
Arrancamos la Ducati Scrambler
El primer paso, sentarnos en ella, es sencillo, muy sencillo, porque el asiento está a una altura perfecta para mi 1,75 m de estatura. Bien mullido, pero sin ser tipo sofá que te adormezca en la ruta. Pones las manos sobre el manillar y descubres que está todo ahí, al alcance de la mano, como si fura tu moto de toda la vida. Los retrovisores quedan a una altura adecuada, y tras ajustarlos un poco ves por ellos lo que se ve en todas las motos actuales, un poco de tus brazos y la carretera tras de ti. Como el motor no vibra más que lo habitual en un bicilíndrico a 90º en los retrovisores no se aprecia ninguna vibración molesta.
Buscamos la llave, que está en una cerradura situada en el medio del manillar, la accionas y el reloj que hace las veces de tablero de instrumentos cobra vida. Pero, espera, ¿dónde está el reloj? Este no está situado en el centro, sino que está descentrado, a la derecha del manillar. En él está centralizada toda la información, el cuentarrevoluciones que corre por el perímetro con una serie de barritas que se van iluminando. El velocímetro, digital, ocupa el centro del mismo con unos números bastante grandes. Sobre él van los cuentakilómetros, uno total y dos parciales que se cambian fácilmente accionando los botones habilitados en la piña izquierda. También puedes elegir entre ver la temperatura del aire y alguna opción más, pero deprisa porque los demás del grupo ya han arrancado sus respectivas motos y están esperando en la puerta para salir de ruta.
Salimos a rodar
El motor arranca sin problemas, con 51 km en el cuentakilómetros, la unidad que elegí estaba prácticamente virgen, pero aún así estiraba las marchas más que de sobra para rodar por las grandes avenidas de Barcelona. Desde Poble Nou salimos a la Ronda Litoral y a través de ella acabamos por la zona de Sitges en una carretera revirada, muy revirada, con muy poco tráfico y un asfalto más que aceptable. En las vías rápidas, además de la limitación de los discos te acabas auto-limitando tu mismo la velocidad a la que circulas, porque hay que recordar que delante de nosotros no hay nada que nos proteja lo más mínimo del viento. El ancho manillar, con una postura muy cómoda y natural, nos deja con los brazos abiertos para recibir en el pecho el viento.
La potencia del motor es más que suficiente para dejarte todos los puntos y un buen montón de dinero cada vez que pasa por debajo de un radar, así que lo mejor es tomárselo con tranquilidad y disfrutar de la ruta. Precisamente lo que nos dijeron antes de salir con la moto. El equipo de frenos está dominado por un único gran disco delantero mordido por una pinza Brembo de cuatro pistones y anclaje radial. Esta combinación frena más que de sobra, y en ningún momento compromete el trabajo de la horquilla Kayaba invertida con barras de 41 mm de diámetro.
Volviendo a la carretera de curvas, tocaba aplicarse para no perder la estela de los que iban delante. Algo muy sencillo porque la entrega de potencia, junto con la dosificación de los frenos y las suspensiones hacen de la Ducati Scrambler toda una madre en la conducción. Efectivamente, el objetivo de hacer una moto fácil de conducir ha sido alcanzado con esta. Incluso los Pirelli MT60 RS te permiten inclinar con buen ángulo sin perder agarre ni comprometer la trazada. ¿El ABS? Pues hasta que no vuelves a arrancar la moto ni te das cuanta de que está ahí el testigo del ABS, porque en marcha no interfiere para nada en la conducción. Habrá que comprometer más la moto para averiguar hasta donde te deja llegar.
Así, casi sin comerlo ni beberlo llegamos a la zona donde nos esperaba la comida y la sorpresa que nos tenían preparada para los asistentes. La comida nos la ofrecieron desde una preciosa Furgoneta Citröen H convertida en puesto callejero de comida californiana atendido por los chicos de Eureka street food. Todo un lujo después de sudar un rato haciendo curvas. La sorpresa era que junto a la furgoneta de avituallamiento nos esperaba una pista de Skate, con unos cuantos monopatines y la condición de que el que no se animara a rodar se iba a quedar sin camiseta conmemorativa de la presentación. Y el que lo hiciera mejor (a votación de los demás) se llevaría un bonito reloj Ducati Scrambler.
Y como en nuestra cultura, un desafío así no puede quedar sin atender, allí que nos pusimos todos manos a la obra. Menos mal que casi nadie se quitó las protecciones que usamos para la moto, porque las caídas fueron desde lo que podríamos calificar como moderadas hasta leves y divertidas. Al final el vencedor fue Fran de Ducatinoticias, por su composición del auténtico skater sobre cuatro ruedas de nylon.
Acabadas las risas, pusimos rumbo hacia Barcelona, volviendo por las denominadas curvas del Garraf. Como el tramo está completamente señalizado con línea continua el regreso lo hicimos al ritmo del tráfico, disfrutando de las vistas, y disfrutando de nuevo de la docilidad de este motor Desmodue que tan afinado han dejado para la Ducati Scrambler. Antes de devolver las motos al punto de salida, pasamos por una gasolinera cercana para rellenar los depósitos y dejarlos listos para el día siguiente. Sin anotar los kilómetros recorridos ni la cifra exacta de cada repostaje parece que la autonomía andará un poco justa para hacer grandes tiradas, pero esto habrá que confirmarlo en una prueba más exhaustiva.
Las únicas pegas que puedo sacarle a la Ducati Scrambler son que el reloj que hace de cuentakilómetros no es muy visible en según que circunstancias, por su posición y por contener "demasiada" información concentrada en tan poco espacio. Tampoco me gustó la escasa protección del colector de escape que pasa junto al estribo derecho, justo a la altura dela pantorrilla del piloto. Y otro detalle a tener en cuenta es que la posición del pasajero no parece demasiado amplia, aunque los estribos quedan perfectamente situados para que este no vaya con las piernas demasiado flexionadas.
Así dimos por concluida la presentación nacional de la Ducati Scrambler. Una moto que a poco que el público general entienda el concepto creo que va a ser tan importante en la historia de Ducati como lo fue la Ducati Monster en su momento. Y todo esto sin dejar de lado motos tan tecnológicamente avanzadas como las Ducati Multistrada DVT o las Ducati 1299 Panigale. En su momento ya dije que la Ducati Scrambler es una moto que me compraría, y hoy, tras esta toma de contacto me reafirmo en mi opinión. Ahora sólo me falta encontrar la financiación.
Ducati Scrambler - Ficha técnica
Motor | ||
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Tipo | Bicilíndrico 4 tiempos a 90 º | |
Cilindrada | 803 cm³ | |
Refrigeración | Aire-aceite | |
Diámetro x carrera | 88 x 66 mm | |
Relación de compresión | 11 a 1 | |
Potencia máxima | 75 cv a 8.250 rpm | |
Par máximo | 68 N·m a 5.750 rpm | |
Alimentación | Inyección electrónica cuerpo de 50 mm de diámetro con dos subinyectores | |
Encendido | Electrónico CDI | |
Transmisión | ||
Embrague | APTC multidisco en aceite | |
Cambio | 6 velocidades | |
Transmisión final | Cadena | |
Parte de ciclo | ||
Chasis | Chasis tipo Trellis en tubo de acero | |
Suspensión delantera | Horquilla telescópica Kayaba invertida, barras de 41 mm, 150 mm de recorrido | |
Suspensión trasera | Amortiguador Kayaba, precarga ajustable, 150 mm de recorrido | |
Freno delantero | Pinza anclaje radial de cuatro pistones, disco 330 mm, ABS de serie | |
Freno trasero | Pinza anclaje flotante con pistón simple, disco 245 mm, ABS de serie | |
Rueda delantera | 110/80 R 18 Pirelli MT 60 RS | |
Rueda trasera | 180/55 R 17 Pirelli MT 60 RS | |
Dimensiones y pesos | ||
Longitud | 2.100 (2.165) mm | |
Altura | 1.390 mm | |
Anchura | 845 mm (espejos) | |
Distancia entre ejes | 1.445 mm | |
Altura del asiento | 790 (770) mm | |
Peso en orden de marcha | 186 kg | |
Capacidad del depósito | 13,5 litros | |
Consumo medio | N/D | |
Precio | ||
Precio recomendado de venta | N/D | |
Versiones disponibles | Scrambler Icon, Scrambler Urban Enduro, Scrambler Full Throttle, Scrambler Classic |
Ducati Scrambler - Valoración
.85
A favor
- Motor dosificable
- Frenos perfectos
- Estética propia
En contra
- Instrumentos demasiado comprimidos en uno
- Posicionamiento escapes en la derecha
- Poco espacio para el pasajero
Los gastos de la presentación de la Ducati Scrambler han sido asumidos por Ducati Ibérica. Para más información, consulte nuestra política de relaciones con empresas.
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Vídeo vía Youtube | MotorpasiónTV