Es un fenómeno del que la policía ya lleva avisando tiempo. Incluso multando. Hablamos de los fotógrafos en curvas. Esa actividad que consiste en ponerse estratégicamente en curva, con un buen equipo, a tirar fotografías a los moteros que pasan. Luego se suelen vender.
¿Qué es lo que pasa? Que incita a llevar la moto al límite y tomar posturas extremas. Algunas acaban en caídas. No solo lo dice el sentido común, también lo advierte la policía. Pero es algo que pasa en España y fuera de España. En Reino Unido la policía ya está alertando, advirtiendo y pidiendo a estos fotógrafos que cesen la actividad ante una posible relación causa-efecto con los accidentes.
En España, la Guardia Civil también está al tanto
El modus operandi es siempre el mismo. Usualmente, fin de semana, cuando los moteros salimos a rodar. El fotógrafo, posicionado en un ángulo en el que pueda captar a los motoristas y tomar varias fotos. Muchos optan por aparecer ante cámara en una posición sosegada, tranquila. Perfecto.
Otros no. Otros buscan la mejor foto de su vida. Y eso supone tocar rodilla y hasta codo, en determinadas ocasiones. Tocar rodilla y codo en asfalto es una actitud ciertamente peligrosa, que no ilegal.
Lo dice la Unión Internacional Defensa Motociclistas: "No se puede sancionar lo que no es sancionable. La supuesta infracción de sacar la rodilla pudiendo tocar con la misma el suelo durante la gestión de una trayectoria curva no es infracción, pues no está tipificada como tal, no afecta a la libertad de movimientos, el campo de visión o la atención en la conducción".
Otra cuestión es que la correlación entre ir tocando rodilla en carretera abierta y la seguridad sean parejas, que no suele darse el caso. El que va lanzado buscando el ángulo máximo puede incurrir en velocidades que superan el máximo permitido, o incluso a invadir carril contrario. Y no es la primera vez que por este motivo se multa con una "conducción temeraria", debiendo el agente incorporar a las explicaciones cuál ha sido esa conducta.
El caso es que estos fotógrafos, según la policía de Reino Unido, incitan a ir rápido y tomar posturas peligrosas en carretera abierta. Y eso, a veces, acaba en desastre, digamos accidentes.
La policía no ha dudado en vincular una serie de accidentes graves en moto con la presencia de los fotógrafos, según Visordown. La policía afirma que la presencia de los fotógrafos está provocando que la gente circule de forma peligrosa, afirmando que el exceso de velocidad, las infracciones de tráfico y los caballitos se deben a su presencia. Sin tapujos.
"El problema no es solo que algunos motociclistas exceden muchas normas de tránsito con su forma de conducir, como el exceso de velocidad, los adelantamientos peligrosos y los caballitos, sino que algunos incluso se quitan la matrícula para evitar ser detectados", detallan.
Lejos de dejarlo en un aviso, han emitido una advertencia formal a tres fotógrafos anónimos. La notificación les exige que no acudan a la zona de Fish Hill con la intención de fotografiar motocicletas que pasan, lo que les prohíbe hacerlo durante 12 meses. En España todavía no se ha visto caso así.
Sin embargo, sí que han proliferado entre las redes sociales. Lo explica muy bien este youtuber, Kira Moto, que habla sobre la famosísima curva Tamayo, en honor al fotógrafo: "Es una curva donde se pone un fotógrafo, pero hay gente que se viene muy arriba en la curva, y es verdad que tengo sentimientos encontrados. Respeto el trabajo del fotógrafo pero la gente se viene muy arriba y a veces hay caídas. Él se esfuerza en recordar que la carretera no es un circuito".
De hecho, se encuentra con él. Y la Guardia Civil también, que acaba parando, bronca incluida: "Muchas personas hacen fotos. Los moteros tumban mal y acabamos con las motos allí. Es un punto caliente". O sea, que aquí también hay toques de atención, aunque no los veamos en las noticias.
Imágenes | Dirección General de Tráfico (DGT)