Mika Kallio y KTM han sido los protagonistas de la prueba de 250cc, entre ellos y Hiroshi Aoyama han puesto el color del podium con un doblete que impulsa a Kallio al liderato consistente en el mundial, 21 puntos por delante de Mattia Pasini y con Héctor Barbera bastante alejado, perdiendo un poco de comba con ese sexto puesto de hoy en China.
Lo cierto es que hoy hemos visto como todas las carreras han sido realmente valiosas en algún sentido, con un sorprendente Ianonne venciendo sobre los virtuales (y reales) hombres fuertes de la categoría, y a Valentino Rossi volviendo a lo más alto con ganas. Aquí hemos visto, por ejemplo (y quitando la victoria de Kallio y su confirmación como líder sólido), a un Alex Debón muy combativo que se ha sobrepuesto a un toque con Julian Simón y ha terminado por delante de Héctor Barberá. Este último, Barberá, partía en buena posición después de haber protagonizado una sesión de calificación espectacular, pero una vez en carrera las cosas no han salido del todo como se esperaba, y finalmente ha terminado en una discreta sexta posición. Muy mala pata también para Álvaro Bautista, que a pesar de salir el primero ha visto como una inoportuna salida de pista hacía que finalmente pudiese pasar la linea de meta en duodécima posición. ¡Qué pena!
Un Gran Premio que nos deja un sabor agridulce en cuanto a nuestros pilotos, que nos ha enseñado cómo Mika Kallio toma posiciones para encarar con un buen colchón de puntos, y sobre todo, con un buen colchón moral de cara a las siguientes carreras, este es el campeonato quizás con mayor ventaja de un piloto sobre los demás.