Hace unas semanas os informábamos de la crítica situación en la que se encuentra Gas Gas. La compañía de Girona necesita un inversor que asuma la deuda de 40 millones de euros que han ido acumulando durante los últimos años y, según informa Enduro Pro, KTM estaba de visita en la sede de la compañía para analizar las instalaciones catalanas. Pues bien, contra todo pronóstico, los trabajadores dieron la bienvenida a los representantes de KTM con la quema de neumáticos y un maniquí ahorcado al que habían vestido con la indumentaria de KTM.
Por si a los austriacos le quedaban dudas de lo que significaba, los trabajadores, temerosos de que se pudieran llevar la producción a su fábrica en Mattighofen (ignorando aquí el hecho de que KTM produce todas su Duke pequeñas en India), les dedicaron un cartel en el que intentaban decir "KTM, ésta no es tu casa". Y digo intentaban porque, compañero, si quieres mandar un mensaje asegúrate primero de que lo que escribes tiene sentido y es comprensible por el receptor. Desde luego, si alguien en la compañía naranja tenía la intención de dejar allí la producción y salvar los puestos de trabajo de Gas Gas, este "cariño" mostrado va a conseguir que se lo piense un par de veces más.
En una situación tan extrema como en la que se encuentra Gas Gas en la que o encuentra un inversor o desaparece, no es posición en la que se pueda exigir condiciones. Sospecho además que no existen demasiados interesados en invertir capital en un negocio que lleva años generando pérdidas, además de tener que asumir 40 millones de euros en deudas. Puedo imaginar que gigantes asiáticos o indios puedan estar interesados también, en cuyo caso, con el coste de producción que tendrían en India, no creo que durara demasiado la fábrica catalana.
Llegados a este punto espero que puedan llegar a un acuerdo para salvar la marca y los puestos de empleo.
Nota: para la próxima, mejor: "KTM, das ist nicht dein Zuhause".
Vía | Enduro Pro