Motores diésel y motos no parecen casar del todo bien. Históricamente no tienen mucho sentido ni funcionalidad, algo que ya se descubrió hace bastantes años. Pero no todos piensan igual, y fanáticos de los turbo diésel de las cuatro ruedas se afanan por hacer sus propias versiones en moto.
MotoGO es un preparador y youtuber ucraniano al que le van los retos, y los motores diésel. Sus últimas preparaciones son exclusivamente motos diésel. Y el resultado final es dantesco, como poco.
Aspecto de moto, ruido de motor TDI
Hay proyectos personales que no conocen límites. Como el de este ucraniano al que le gustan dos cosas: las motos soviéticas antiguas y los motores diésel. Una combinación explosiva que se le ocurrió hace ya varios meses y que decidió convertir en realidad tras comprarse un pequeño garaje donde trabajar en sus creaciones.
Para quienes no las conozca, las motos Dnper son máquinas de origen ucraniano, fabricadas principalmente en la ciudad de Kiev. Más conocidas como Dnepr-Ural su historia se remonta a la época soviética con diseños de motos alemanas capturadas durante la Segunda Guerra Mundial, especialmente de las BMW R71. Algunas siguen sobreviviendo... Como esta.
A lo largo de varios vídeos este ucraniano va dando forma a su particular moto diésel, utilizando la base de una vieja Dnper. El corazón mecánico es el alma de esta creación: el motor 1.4 TDI de un Volkswagen Polo.
Para la transmisión y embrague utilizó las partes de una vieja BMW achatarrada. El chasis, por ejemplo, lo construyó él a mano, con unas precisas soldaduras, y hasta un sistema de suspensión delantera a medida. Evidentemente no fue un proceso fácil, y en su serie se va encontrando varios problemas como la falta de potencia o la centralita defectuosa.
Las mejoras fueron llegando vídeo a vídeo. Cuando consiguió echar la moto a andar, se le ocurrió meterle un enorme turbo que sobresale del lateral. Inicialmente la potencia era de unos 75 CV de fuerza, y con los turbos y una reprogramación pretende subir la apuesta hasta los más de 150 CV.
En los últimos capítulos la podemos verla rodar, con ese particular ruido a motor TDI, pero enfrascado en el chasis de una vieja moto ucraniana. Una rara y curiosa combinación que pretende homologar y matricular para usar todos los días.