Para quien no lo sepa, el Superenduro es una "nueva" disciplina que consiste en juntar enduro, enduro indoor y supercross en un mismo espacio. El resultado suelen ser unas pruebas muy espectaculares donde no sólo cuenta ser rápido, sino que hay que ser muy técnico y estar en una forma física cuasi-titánica. Pero ésto no viene de ahora.
En el vídeo que podéis ver a continuación encontraréis unas cuantas cosas fascinantes. Las fieras dos tiempos de cross rodando de forma salvaje en un circuito montado en las instalaciones de un velódromo, los pilotos no sólo ruedan por la pista sino que también por las escaleras entre el público y por uno de los pasillos de acceso, hay saltos grotescos, unas motos con ruedas de tacos, otras con ruedas lisas, curvas imposibles, otras curvas peraltadas... algo difícil de ver en la actualidad, así que merece la pena aunque la calidad no sea la mejor precisamente.
Los finales de los años 80 y principios de los 90 fueron una época distinta. Aquellos tiempos en los que los Grupo B rondaban los rallies y las 500 de dos tiempos lo petaban tanto en el asfalto como fuera de él. Los pilotos también eran de otro tipo y no conocían lo que era ser políticamente correctos, ni les importaba demasiado eso de las medidas de seguridad.
Tan así eran que en una competición en la que posiblemente no se jugasen nada más que el honor de ganar, al darse la salida tras el primer accidente alguno hay que se salta la puerta antes de que se baje.
Ahora os reto a que veáis de nuevo el vídeo y anotéis las medidas de seguridad que podéis ver. Pero prestad atención a cuando vuelven a entrar en la pista tras rodar por el pasillo. Fijaros en la distancia a la que pasan del techo de las escaleras de acceso al volver a entrar en pista. Las dos banderas rojas hasta me parecen pocas.
Vía | Mad Riders