Hace algunas semanas, os acerqué la que probablemente es una de las pruebas de enduro más difíciles: la Red Bull Romaniacs. Xavi Galindo y yo nos pusimos en contacto para intentar acercaros cómo se vive una competición de este tipo desde dentro. Además, queremos aprovechar la ocasión para que lancéis las dudas o preguntas que tengáis a Xavi, que gustosamente intentará contestar.
Como sabréis, esta era la primera vez que participaba en esta prueba, pero hasta el tercer día lo estuvo haciendo francamente bien. Entonces, un mal apoyo acabó con una fractura en su pierna y con las esperanzas de proclamarse vencedor, pues se encontraba al frente de la clasificación general.
Preparativos previos
Lo primero que había que hacer era informarse de cómo se desarrollaba la carrera. Para ello, contactó con Melcior y Alex Antor, que ya habían participado. El tema de la logística se encargo David, de Mundo-Offroad. Él fue el encargado del traslado de los equipos y de la asistencia durante la prueba.
La carrera consta de cuatro días de competición junto con un prólogo, y se hace con GPS. Todo arranca desde la localidad de Sibiu, una ciudad nueva y moderna en contra de lo que podría parecer. Allí se hacen las verificaciones, en las que prima la seguridad de los participantes. Daros cuenta que es una carrera con jornadas muy largas y zonas de difícil acceso, por lo que la comunicación entre los pilotos y la organización debe ser lo más rápida posible en caso de que ocurra cualquier percance.
Prólogo
El prólogo se divide en dos jornadas, una por la mañana y otra por la tarde. Por la mañana, una especial en la que se sale de uno en uno en función del dorsal que te haya dado la organización. Los tiempos conseguidos determinan el orden de salida para las mangas eliminatorias de por la tarde, que definirán el orden de salida para el día siguiente.
Estas mangas se desarrollaban en un tramo recto, con muchos obstáculos que se recorrían en apenas cuarenta segundos. Había que ser decidido y rápido. Xavi consiguió el cuarto mejor tiempo por la mañana y gano su manga y la final, por lo que saldría el primero al día siguiente.
Primer día
El problema que se encontró Xavi al ganar el prólogo el día anterior es que salía el primero (a las 6:30 de la mañana) y a las primeras trialeras las tuvo que hacer de noche. Además, el orden de salida de esta prueba es especial. El primero y el segundo salen con cinco minutos de diferencia, y entre el segundo y el tercero también. A partir de aquí, la diferencia entre los participantes es de un minuto.
Pero este tiempo es acumulativo. Es decir, el segundo ya sale con una desventaja en la clasificación general de cinco minutos, y el tercero de diez minutos. Por lo tanto, el que sale en quinta posición ya lleva una desventaja respecto al primero de 12 minutos (5+5+1+1). Parece una barbaridad, pero con la dificultad de la prueba, las diferencias son escasas.
El primer día, el terreno estaba complicado y resbaladizo por la lluvia. Xavi llegó a la asistencia perdiendo terreno y sin saber muy bien porqué. Un poco más tarde, después del repostaje, Birch y Lettenbichler lo atraparon y pudo navegar con ellos y aprender algún truco.
Los que ya han ido más veces, llevan dos GPS, uno con visión más cercana que otra para poder ir anticipando el recorrido. Unos kilómetros mas tarde, Xavi aprovechó que los otros se quedaron atrapados en una trialera para escaparse y llegar a meta. Pero llegar no era tan fácil: un peralte de madera encima de un río, una pasarela de hormigón y una de madera colgante. Todo salió bien pero otros se fueron de cabeza al agua.
En el cómputo general, había sido cuarto y en esta posición saldría al día siguiente. La machada de ese día fue de nada menos que 7 horas de carrera, y al día siguiente, tocaba otro tanto de lo mismo.
Continuará...
Vía | Xavi Galindo En Moto22 | Entrevista con Xavi Galindo (1/2), (2/2)