Buenas noticias para los amantes de los dos tiempos. Beta ha lanzado al mercado su nueva RR 125 2T, una moto de enduro diseñada para crear un puente de unión entre los modelos de 50 cc de la marca italiana y sus hermanas mayores de 250 cc y 300 cc.
A pesar del retroceso vivido por este tipo de motores en la última década, parece que en estos últimos años las motos de dos tiempos están volviendo a renacer y sobre todo en las disciplinas de offroad, donde a las ya conocidas KTM, Husqvarna o GasGas entre otras se suma la nueva apuesta italiana en la categoría pequeña.
Motor divertido y conjunto ligero, las esencia del 2T
Está claro que la Beta RR 125 2018 es una moto con ADN de competición y con un único y claro protagonista: su motor. Diseñado íntegramente por los ingenieros de Beta, el objetivo a la hora de crearlo ha sido el de optimizar al máximo sus capacidades manteniendo la compacidad del bloque.
Dentro del carácter típico de un motor de dos tiempos, la RR 125 quiere ser una moto progresiva y fácil de llevar, con un motor elástico que puede ser efectivo desde bajas vueltas hasta la parte alta del cuentarrevoluciones. Una parte importante del motor heredada de los motores mayores de Beta es la válvula progresiva, que permite esta flexibilidad.
Así mismo, los componentes internos del motor han sido estudiados a conciencia para controlar plenamente sus posiciones relativas y para poder reducir el peso del conjunto sin que su resistencia estructural se haya visto mermada. Además, se ha prestado especial atención a la cámara de combustión y a la salida de gases de escape sin olvidar los cojinetes del cigüeñal.
En cuanto a la transmisión, la Beta RR 125 2T equipa una caja de cambios de seis velocidades con ruedas dentadas reforzadas para aumentar su resistencia a los esfuerzos y al desgaste. Por otra parte, el embrague multidisco bañado en aceite ha sido ubicado en la parte más baja posible para conseguir un centro de masas más cercano al suelo. Pensando en la comodidad, en Beta han incorporado motor de arranque eléctrico a su pequeña enduro.
En cuanto a la parte ciclo, la Beta hereda el chasis de las 250 cc y 300 cc pero adaptado a sus necesidades. El chasis está fabricado en acero al cromo-molibdeno y sus anclajes se han diseñado teniendo en cuenta la mayor reducción de vibraciones transmitidas posible.
Las suspensiones vienen firmadas por Sachs, con una horquilla de 48 mm de diámetro. Los frenos Nissin también son de primer nivel. Los protectores del cárter están fabricados en poliamidas y el depósito de combustible se ha reducido para mejorar la posición de conducción y la ergonomía. Su precio estimado es de 7.800 euros y como no podía ser de otra manera, su homologación a la normativa Euro4 es completa.