Muy mala noticia la que me he desayunado esta madrugada. No me lo esperaba, pero Marc Márquez no ha pasado el reconocimiento médico y no podrá tomar parte en la carrera de Malasia. Dos accidentes graves en solo una semana es una factura muy alta para un piloto que tiene todo el tiempo del mundo por delante para hacer historia. Historia que ya ha hecho.
Marc se ha hecho daño en la zona cervical, la cabeza y el pie. La visión no era perfecta esta mañana, las curvas a izquierdas no las podía trazar bien, según Emilio Alzamora "no es momento para la épica", como decía en El País esta madrugada. Y tiene razón, por mucho que nos duela ser espectadores de una carrera agónica en la que a Stefan Bradl "le basta" con ganar la carrera para ser campeón, la salud es lo primero, y a Marc le queda mucho por delante.
Y ese es el dato, Stefan Bradl debe ganar para ser hoy campeón del mundo. Si no habrá que esperar a Valencia, y creo que todos, Bradl incluido, preferimos que, si hay que perder las posibilidades de título, sea con Marc en la pista, luchando a brazo partido. Mientras tanto, espero que se recupere totalmente de sus lesiones y contusiones, ¡ánimo Marc!