Ese hombre que veis ahí tan entrañable, y al que no conocía hasta hace pocos días, se ha convertido para mí, de la noche a la mañana, en la personita a la que más envidio. ¿El motivo? Se trata del mayor coleccionista de MV Agusta que existe en el mundo. Sí, sé lo que estáis pensando, aquí el amigo no tiene que tener una mala cuenta corriente, porque sus caprichitos son de los carillos. Su nombre es Gary Kohs y lleva catorce años persiguiendo por todo el mundo los modelos más emblemáticos de la casa italiana.
Sí es de alabar, que como él mismo indica, de nada sirve tener una gran colección sin que pueda ser admirada por todos. Así, en estos momentos podemos ver todas y cada una de ellas en el Alden B. Dow Museum of Science and Art hasta el próximo 10 de Abril. Lo único malo es que igual nos pilla un poco lejos, ya que se encuentra en Michigan, Estados Unidos. En cualquier caso, el viajecito merecería la pena, ya que en dicha muestra podemos encontrarnos con modelos tan preciosos como la MV Agusta Otanttrate de 1960 o las clásicas MV Agusta 750 S, de las que tiene varias distintas, pasando por otras como el ciclomotor de 48cc o las más actuales MV Agusta F4 y MV Agusta Brutale, de la que también tiene varios modelos. Vamos, que no le falta ninguna.
Gary Kohs empezó su andadura en el mundo de las dos ruedas con veintiún años, cuando sus padres le dejaron, comprándose una Triumph Bonneville 750 que sigue conservando intacta a día de hoy. Pero lo que sin duda ha marcado su vida ha sido la figura de Massimo Tamburini (como a tantos otros, jeje), al que ha seguido durante toda su carrera. Así, cuando este puso en juego la Ducati 916, a Gary no le quedo otra que hacerse con un par de ellas, por si acaso. Pero su pasión por MV Agusta nació con la MV Agusta F4 Oro, que le despertó el interés por las motos más clásicas de la marca italiana. Poquito a poco se fue dando cuenta de que estaba ante una marca con una historia apasionante donde caben desde ciclomotores hasta una tecnología y un diseño nunca antes vistos.
Aunque su búsqueda comenzó por los Estados Unidos, pronto se dio cuenta de que era en Europa donde podría encontrar todos los modelos, sobre todo, evidentemente, en Italia, por lo que no dudó en hacerse con una red de confianza que le transportara sus adquisiciones e hicieran unas buenas restauraciones. Como decía, son catorce años (y mucho dinero) para reunir esta colección, que asegura que ha sido a lo largo de su vida su mayor satisfacción y diversión. ¡Cómo para no serlo!
Volviendo a su obsesión por que todos podamos acceder y ver esta maravilla, ha creado una página web llamada The MV Agusta Collection en la que os aseguro que podéis pasar las horas muertas, y hablo por experiencia. En ella os vais a encontrar con todos los detalles de cada uno de los modelos que tiene en su colección, así como las anécdotas y forma que rodearon sus compras, y es que el propio Kohs asegura que ha vivido tantas historias que Internet no es lo suficientemente grande para contarlas. En cualquier caso, no debéis pasar sin ver esa página, ya que os repito que es impresionante toda la información, con fotos incluidas, que tiene. Y ahora, para que os vayáis haciendo una idea y entendáis porque envidio a este hombre, os dejo un vídeo de la exposición de Michigan. Os prometo que desde que he visto tanta MV Agusta F4 junta no he podido dejar de limpiarme la baba… ¡Qué mal repartido está el mundo!
Vía | Asphalt and Rubber
Página Oficial | The MV Agusta Collection
En Motorpasión Moto | MV Agusta