Hay motos que te marcan para toda la vida. Y aunque nunca las hayas tenido en tu garaje, siempre has soñado con ellas. Podemos intuir por dónde van los tiros, y dos de las más deseadas de todo motero de los años noventa llevan nombre de Honda.
Las Honda NR750 y RVF750 RC45 son mitos vivientes, y que se pueden comprar además. Un concesionario de Inglaterra las ha puesto a la venta, y están de estreno, literalmente. Eso sí, su precio es de auténtica locura.
Probablemente sean las dos superbikes más míticas de Honda
El hábil motero que en sus días compró una Honda de la vieja escuela y la guarda, tiene un tesoro. O al menos esa es la conclusión que se puede sacar del mercado de la venta de motos. Y si no, es para estudiar el precio de una Honda NR750 y otra RVF750 RC45 de 1992 y 1994, respectivamente. Motos con unas cuantas décadas a la espalda.
El caso es que un concesionario Honda (Farham) en Inglaterra tiene estas dos motos a la venta. Y curiosamente, están de auténtico estreno. Apenas tienen 100 kilómetros en el marcador, y por su precio, te puedes comprar un apartamento.
La Honda NR750 es la primera de las protagonistas. Solo existieron 300 unidades. Su apellido NR fue apodado popularmente "Never Ready" (Nunca Lista) por el tiempo que tardaron en preparar esta moto en Japón. Tiene un motivo: en sus entrañas late un corazón de pistones ovales, una arquitectura de carreras. El V7 de 750 cc rendía 115 CV, y era lo más top de la época.
Si en su día costaba 50.000 euros salida de fábrica, hoy su valor se ha duplicado, incluso triplicado, casi. Ahora cuesta 134.480 euros al cambio.
La otra joya es la Honda RVF750 RC45, probablemente la superbike más reconocida e histórica de la marca. Es la sucesora de la RC30 y que nació con el objetivo de homologar el nuevo modelo para correr en el Mundial de Superbikes, perteneciente a la época dorada del motociclismo.
Su V4 fue el último: de 750cc a 90 grados, con inyección electrónica y un propulsor que daba 118 CV gracias al kit HRC. Esta moto nació de la cabeza de Soichiro Honda con una única meta: ganar el Mundial de Superbikes. Su éxito se demoró, y no llegó hasta 1997 con John Kocinski. Esta moto es historia viva, y los más clásicos se pirran por ella.
Es raro encontrar una unidad con menos de 150 kilómetros, que es lo que tiene esta moto. Su precio es algo más económico que la anterior, 76.000 euros, en sintonía con lo que se venía pidiendo por otras unidades, aunque esta está de reestreno. Y si por un casual te interesa alguna de estas dos joyas, puedes acceder al enlace del concesionario aquí.