Los robos de motos son cada vez más habituales en Europa. Y el problema es que los ladrones utilizan métodos más descarados para ejecutarlos, sin ningún tipo de pudor. El ejemplo de que hay un problema en las calles es este otro vídeo en el que roban una moto a martillazos, literalmente.
Dejar la moto en la calle se está convirtiendo en una tarea de riesgo, y prueba de ello es este vídeo en el que un par de ladrones no toman más que unos segundos para romper las medidas de seguridad de una moto y llevársela puesta.
Consiguen llevarse la moto e incluso amenazan a un civil
Si hace unos pocos días veíamos cómo un par de ladrones robaban descaradamente una moto frente a una cafetería ante la atenta mirada de los clientes, la escena de hoy tampoco tiene desperdicio ninguno.
Y es que la oleada de robos de motos en Europa se refleja bien a través de estos vídeos. Los datos son preocupantes (como desgranaremos más adelante), y las formas de ejecutarlo, también.
El vídeo en cuestión muestra a una Yamaha MT-07 de la última generación aparcada en una zona turística. Concretamente la acción sucede en pleno centro de la ciudad, en los muelles de Dublín, en Irlanda.
Dublin pic.twitter.com/HXaqRYePXb
— aney stokes (@VideosIrish) June 28, 2023
Una banda de jóvenes está intentando robar una moto a martillazo limpio mientras un transeúnte los graba e intenta detener, sin mucho éxito aparentemente. Incluso llegan a encararse con el ciudadano que intenta parar el robo.
Uno de los jóvenes se acerca a la Yamaha con un martillo y arremete unos cuantos golpes contra la cerradura delante de la moto. La alarma ya está activada, pero no les parece importar mucho. Mientras tanto, el valiente ciudadano intenta detener la acción.
"¡Chicos, miradme, parad!", gritaba continuamente el hombre a los delincuentes, que no cesaron en su temeraria acción mientras le amenazaban con el cuchillo. Rompen la cerradura, liberan el bloqueo de la moto de una patada y se la llevan puesta.
El triste destino de las motos robadas en Europa
La Garda (policía irlandesa) ya "está investigando la toma no autorizada de la moto), pero esto deja un preocupante caso más, sumado a todos los que no se ven. Y eso que Irlanda no es uno de los sitios donde más motos se roban (menos de 400 al año, según datos de la policía).
Pocas de esas motos se acaban recuperando, lo que nos lleva a preguntarnos qué es lo que hacen con las motos robadas. Es igual de habitual que acaben en el propio país como en terceros, y lo más habitual es que acabaen en desguaces o talleres y las desmonten por piezas.
Esas piezas acaban siendo vendidas a terceras personas, o simplemente acaban apiladas en un almacén donde las repintan y revenden. A veces se vende la moto completa por unos 500 euros, y es el particular el que se ocupa de despiezarla.