Hoy me toca a mi el tema de las motos de 250-600 cc para los novatos, y como bien habéis leído en el título la que he elegido es la Honda NX 650 Dominator. Esto que parece un monográfico sobre motos Honda de Segunda Mano, realmente no lo es. Albi eligió la Honda CB500 pensando en una moto polivalente, que permitiese recorridos medios pero sin necesidad de ser una Deportiva. Carlos eligió la Honda VTR 250 pensando en una moto escuela pero con sensaciones diferentes a la moto elegida por Albi. Y ahora que me ha tocado a mi el turno he elegido la Honda Dominator por unos motivos casi más sentimentales que prácticos.
En su momento, cuando apareció la Honda NX 650 Dominator en el mercado, casi nadie sabia que era eso de una moto Trail ni para que servía. En esa época, veíamos en televisión pruebas como el París Dakar, que empezó con victorias de motos muy parecidas a la Honda Dominator, pero pronto se vio dominado por las grandes motos desérticas que abrirían otra época. Con este panorama Honda presentó en 1988 una evolución más civilizada de las XR de Enduro. Y mira tu por dónde la Honda Dominator empezó a venderse bastante bien.
La Honda Dominator es una moto que muchos tachan de anodina, porque va bien en cualquier situación, pero no destaca en ninguna. ¿Estamos frente a una moto perfecta? Pues creo que no, pero si que estamos frente a una moto que puede ser un perfecto escalón para iniciarse en el mundo de la moto tras sacarte el carnet A2 (con 32 kW no hay que limitarla) o para aquellos que dejaron de ir en moto hace tiempo y ahora quieren retomar las dos ruedas. Hay que recordar que el modelo estuvo en catálogo desde 1988 hasta 2002 con muy pocos cambios más allá de unas pegatinas diferentes y poco más. Siendo una de las motos japonesas que menos modificaciones ha sufrido en los 14 años que ha estado a la venta.
¿Y no será muy alta para mi?
Pues con el asiento a 865 mm del suelo no es la Trail más alta del mercado pero tampoco es la más baja. Esto puede limitarnos a la hora de elegirla si somos de talla media-baja. Creo que es la única pega que se le puede poner a una moto así. De todas maneras, yo mismo no soy el más alto del mundo y con un poco de habilidad puedes manejar cualquier moto con el asiento cercano a las nubes sin demasiados problemas. Los 178 kg que pesa la Honda Dominator en orden de marcha no son demasiados para manejarla en parado, y una vez que te pones en marcha dejan de sentirse.
Con la mente puesta en una moto para uso 80% ciudadana, y un 20% de carretera, puede parecer arriesgado elegir una Trail, pero si no os habéis subido nunca a una de estas motos no podéis apreciar lo cómoda que es la posición, que al ir erguido no te machaca la espalda. Te permite ver lo que pasa un poco más allá de los coches de delante, con lo que puedes anticipar maniobras-trampa y su configuración de suspensiones incluso puede que la acabes agradeciendo si el alcalde de tu ciudad es tan aficionado como el de la mía a las obras sorpresa. Así que si ves que llegas más o menos bien al suelo, y no quieres ir en una RR al trabajo la Honda Dominator es una opción a considerar.
Monocilíndrico de cinco cuatro válvulas y 650 cc
Quizá el punto débil de esta moto sea su punto más fuerte, el motor. Recordemos que estamos hablando de un motor refrigerado por aire con un pistón de 100 mm de diámetro corriendo en su interior, con lo que la mecánica puede llegar a ser un punto a vigilar si quieres que tu inversión no acabe como si hubieses tirado el dinero al mar. La contrapartida es que uno de estos motores, con los adecuados mimos puede llegar a ser indestructible. Pero tienes que vigilar el consumo de aceite y tratar de no pegarle calentones excesivos. Las consecuencias pueden ser bastante catastróficas, con válvulas quemadas o que han tocado el pistón, así que ya sabes que si lo tuyo no es mirar de vez en cuando los niveles o conduces siempre al límite de la línea roja, mejor que vayas pensando en otra moto.
Con estos cuidados básicos, hay Honda NX 650 Dominator circulando por el mundo con más de 100.000 km en sus contadores y en su larga vida ni han pasado por el taller más que para las revisiones indicadas en los manuales. El resto de mecánica, detalles y ajustes están pensados para un uso Off-Road, con lo que si la moto la vas a usar por asfalto a diario seguro que ni te acuerdas de que están ahí.
Vale, me la compro, pero ¿Que miro para que no me timen?
Según se lee en la red, la Honda Dominator es una pieza casi indestructible, pero aún así hay gente capaz de reventarlas. A la ya comentada tendencia a consumir aceite y los posibles calentones del motor hay que sumar que en uso intensivo Off Road la estructura posterior del chasis puede resentirse e incluso agrietarse, con lo que es un punto interesante a revisar cuando vayamos a ver una de estas. Otro punto son las suspensiones, que para Off-Road se quedan cortas y dejan de funcionar correctamente en poco tiempo, aunque si la unidad a comprar no se ha usado en campo más que para pasear por caminos de tierra (de los que no están prohibidos) no debería presentar ningún problema en ese apartado.
Otro punto a revisar es que los frenos funcionen correctamente y las pinzas no se gripen sobre los discos. Esto puede ser fruto también de un uso en ambientes polvorientos y poco mantenimiento. Pero esto ya entra en las recomendaciones que nos dio Albi a la hora de ir a comprar una moto de segunda mano.
A poco que hagas una búsqueda por internet sobre el modelo encontrarás unas cuantas opciones, que van desde las motos más antiguas con que rondan los 1.500 euros hasta los modelos con menos años que casi llegan a los 3.000 euros que nos habíamos puesto como límite. La principal ventaja es que al ser una moto que ha estado tanto tiempo en catálogo hay muchas unidades en el mercado de segunda mano, con lo que podemos encontrar opciones cercanas a donde vivamos sin muchos problemas. A partir de aquí la decisión es tuya, pero recuerda que no hay motos malas, si no malas elecciones de moto.
Fotos Vía | Wikimedia Commons; Van Van Time; Offroadvw
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