Siete trucos para cuidar los neumáticos de las motos y evitar disgustos
Los neumáticos son una de las partes más importantes de nuestro vehículo. Al fin y al cabo es el único elemento de contacto que tenemos con el suelo y su estado tiene que estar siempre en perfectas condiciones sino queremos sufrir un desenlace adverso.
No obstante, hay determinadas situaciones en las que nuestro neumático sufrirá hagamos lo que hagamos, como cuando lo exprimimos al máximo en un circuito o nos vamos de tramo. Por eso, para saber cómo mantener tu neumático en perfectas condiciones te vamos a dar unos consejos prácticos que evitarán problemas en el futuro.
Revisar los neumáticos constantemente evita accidentes
Los neumáticos son uno de los elementos más importantes de la moto, y por lo tanto, mantenerlos 'sanos' será de vital importancia si no queremos acabar por los suelos. Hay que tener en cuenta que los neumáticos son el único elemento de contacto entre el vehículo y la carretera y que cualquier variación que sufran podría afectar al desempeño.
Por eso es aconsejable tener una rutina de revisión con ellos, observando su estructura y entendiendo en qué fase están. Así mismo, hay que estar atento a la composición de los neumáticos porque no tienen el mismo desgaste un neumático blando que uno duro o que uno preparado para el invierno. Así que para que sepáis entender vuestros neumáticos aquí os dejamos unos cuantos consejos.
Vigila el área de contacto
Una de las primeras cosas que debemos observar en nuestra moto antes de salir de ruta con ella es la superficie de contacto. En ella podemos ver la vida que tiene nuestro neumático, si su desgaste es el correcto o si por casualidad hemos sufrido un pinchazo. También deberíamos vigilar la profundidad del dibujo, no dejando que esta exceda los 1,6 mm que aconseja la ley.
Para que todo vaya bien con ellos hay que asegurarse de que el desgaste está equiparado por cada una de sus ruedas aunque dependiendo del eje este puede variar. Por ejemplo las ruedas delanteras tienden a desgastarse antes por los flancos que por el centro mientras que en las traseras es al contrario. Esto se debe a que el tren delantero es el que lleva la dirección de nuestra moto.
Comprobar que llevamos las presiones adecuadas
Uno de los problemas recurrentes por los que el neumático sufre un desgaste prematuro e irregular suele ser debido a presiones incorrectas. Este punto debe ser vital para cualquier usuario pues la más mínima variación en uno de ellos puede llevarnos al suelo. A parte, el consumo puede variar en función de su presión.
Así pues, antes de emprender el viaje comprueba que todo esté correcto. Para ello la presión siempre se debe comprobar en frío, ya que al circular con ella el aire que tiene dentro se calienta aumentando la presión y falseándonos el dato. Si tienes que poner aire, hazlo en los valores que dice el fabricante porque un exceso de presión podría reducir la superficie de contacto del neumático con el suelo; y un neumático sin aire deforma el dibujo y vuelve a la moto torpe e insegura.
Tener una buena alineación y equilibrado
Igual de importante que la presión es tener una buena alineación y equilibrado. Y es que gracias a estos dos parámetros podremos alargar la vida de nuestro neumático evitando, a su vez, situaciones de peligro.
Una buena alineación y equilibrado suele prevenirnos de un desgaste prematuro del neumático y vibraciones molestas. Además, protegerá las suspensiones así como la dirección. Eso si, cualquier golpe brusco sufrido en el neumático puede desajustar estos parámetros, así que es conveniente que después de una situación así compruebes que todo vaya bien en el taller de confianza.
Comprobar la edad de los neumáticos y la elasticidad de la goma
Mucha gente lo desconoce pero todos los neumáticos tienen una fecha de fabricación y unos tiempos de usos. Éstos sirven para decirnos cuándo dejarán de funcionar sus propiedades. El envejecimiento de un neumático también viene dado por factores externos como el clima, su estacionamiento habitual o su uso.
Cuando un neumático reúne condiciones favorables (siempre ha sido aparcado en garaje, nunca se ha metido al circuito y siempre va equilibrado y con presiones correctas) la vida útil de un neumático puede extenderse a más de 5 años y 60 000 kilómetros. Sin embargo, cuando estas condiciones fallan es entonces cuando pueden desfallecer prematuramente (secándose por aparcar a la intemperie, apareciendo grietas por sobrecalentarlos tras meterlos en un circuito y así un largo etcétera).
Para comprobar cómo está nuestro neumático es tan fácil como clavarle la uña y observar el comportamiento de la goma. Si está 'acartonado' o la cubierta presenta grietas, la flexibilidad se verá comprometida y apenas podremos clavarla, siendo lo mejor tirarlo y montar una cubierta nueva. Si está en buenas condiciones se hundirá y volverá a su posición sin mayor problema.
Las temperaturas y su compuesto serán cruciales para su buen desempeño
Otro de los factores que pueden alargar o acortar la vida de los neumáticos son las temperaturas a las que lo sometamos. Normalmente los neumáticos de calle están preparados para soportar las temperaturas del día a día en cualquier tipo de trayecto. Sin embargo, si estos mismos neumáticos los sometemos a sesiones continuadas en circuito es muy probable que empiecen a aparecer las temidas grietas y 'arrugas'.
Lo mismo pasa en el caso contrario. Si montamos gomas de circuito homologadas para carretera en nuestra moto de calle tenemos que tener muy presente que por debajo de su temperatura de trabajo no agarrarán nada, convirtiéndose en una tabla de madera difícil de manejar. En ambos casos, a parte de la temperatura, también afecta el compuesto utilizado.
Un compuesto duro costará más calentarlo mientras que uno blando lo hará más rápido. Esto tiene sus ventajas y desventajas como todo. En el primer caso, aunque cueste más llegar a su temperatura óptima, la duración se podría prolongar en el tiempo, mientras que en el segundo, su vida útil tiende a ser bastante reducida. También va en función de nuestras necesidades y su uso, pero elegir bien el compuesto de nuestro neumático nos ayudará a alargar su vida útil.
Las válvulas no se pueden olvidar
Por último pero no por ello menos importante es conveniente que las válvulas de tu neumático y sus componentes estén bien. Y es que con el tiempo y el uso del vehículo estas tienden a deteriorarse al ser normalmente de goma.
Tampoco debemos olvidarnos de su tapón, ya que es una de las primeras barreras que ayuda a proteger al neumático ofreciéndole estanqueidad y protección frente al polvo.