MotoGP llega a San Marino: el territorio italiano, la kriptonita y muchos caballos ganadores

El final del Campeonato del Mundo de MotoGP se nos está echando encima de manera irremediable. Cuatro Grandes Premios casi consecutivos nos martillean sin descanso justo después de las vacaciones de verano y están poniendo las cosas más claras para algunos y más inciertas para otros. En MotoGP desde luego que si no pasa nada raro Marc Márquez sumará su tercer título y en Moto3 Brad Binder sumará su primera corona. Sus candidaturas son bastante firmes.

Donde no hay tanta claridad es en la pecera de Moto2. En la categoría intermedia Johann Zarco tenía suficiente ventaja como para empezar a pensar en dosificar, pero la inoportunidad de las dos últimas carreras (décimo primero y vigésimo segundo) ha metido a un Álex Rins, que debería estar casi tirando la toalla, de lleno en la lucha a sólo 10 puntos.

MotoGP: la kriptonita de la calculadora

Por mucho que lo intente, es imposible quitarle méritos a la victoria de Maverick Viñales en el Gran Premio de Gran Bretaña. Pudo ser una elección de neumáticos diferente, una climatología que igualase las mecánicas, una carrera con cambio de moto en la que arriesgase con la estrategia o una ración múltiple de caídas en los puestos de cabeza. Pero no, nada de eso.

Viñales triunfó en Silverstone de una forma soberbia, sin paliativos, con una carrera de piloto maduro y ganador. Supo salir bien y colocarse delante, esperar su momento y realizar los pocos adelantamientos que le quedaban para ponerse en cabeza. Eligió bien sus neumáticos con un duro delante y medio detrás, y aunque esa combinación podía no parecer la ideal para tirar fuerte al inicio de carrera empezó a meter segundos de forma constante sin que nadie en ningún momento pudiera recortarle su ventaja hasta convertirse en el séptimo ganador del año en MotoGP.

Hay quien dirá que la lucha desatada por los puestos del podio entre Marc Márquez, Cal Crutchlow, Valentino Rossi y Andrea Iannone permitió la escapada de Mack, pero viendo la carrera con un ojo en la retransmisión y con el otro en el cronometraje en directo, la autoridad con la que Viñales se alzó con su primer triunfo en MotoGP fue total. Nos falta saber si en las seis carreras que le quedan con Suzuki podrá repetir la gesta, lo que está meridianamente claro es que con Yamaha en 2017 sí que lo hará. Por lo pronto ya ha adelantado a Dani Pedrosa en la general para colocarse cuarto.

Por otro lado, me satisface mucho ver cómo las nubes que oscurecieron el cielo de MotoGP hace casi un año a partir del Gran Premio de Malasia (o antes) se han desvanecido. Al empezar la temporada 2016 todos conteníamos la respiración al ver a Marc Márquez y Valentino Rossi disputarse una posición en pista, pero ya no. Además de poder respirar tranquilos, dos de los más grandes pilotos nos han regalado en Silverstone uno de los duelos más entretenidos de todo 2016.

Tras las últimas carreras y lo poco acertado que ha estado Lorenzo en las últimas carreras (un cero en Cataluña, décimo en Alemania, décimo quinto en Holanda, décimo séptimo en Brno y octavo en Gran Bretaña) a excepción del tercer puesto de Austria han permitido que Valentino Rossi se colocase segundo en la general, pero muy lejos de Márquez.

El piloto de HRC atesora 210 puntos por 160 de Rossi, 50 de ventaja tras la carrera británica. Con semejante ventaja Márquez podría relajarse un poco, de hecho muchos han apuntado desde hace algunas carreras que como no necesita arriesgar ha dejado pasar mejores resultados. Bueno, los números están ahí y salvo el décimo tercer puesto de Francia su peor resultado ha sido el quinto puesto de Austria. Tres victorias, tres segundos, tres terceros y un cuarto componen el historial del líder de MotoGP en 2016.

Precisamente el cuarto puesto fue en Silverstone, en una carrera en la que no dio su brazo a torcer en ningún momento y en la que las pilas de la calculadora perdieron toda su potencia al acercarse a Valentino Rossi. El italiano es la kriptonita para la máquina de echar cuentas de Márquez, simplemente no funciona cuando los dos están cerca y tiene un ritmo similar. Y creo que el resultado de este incidente tecnológico es de lo mejor que hemos visto esta temporada. ¿No crees?

Clasificación general de MotoGP:

Moto2: la revancha involuntaria

No hacía falta. Creo que esa es la sensación que se nos quedó a todos al ver el incidente entre Johann Zarco y Sam Lowes en la carrera de Silverstone. No voy a juzgar si la acción fue reglamentaria o no, pero con un podio prácticamente asegurado y Álex Rins rodando en torno a la décima posición, el saldo hubiera sido muy positivo para el piloto francés.

Soy el primero que ha elogiado a Zarco durante toda la temporada reconociendo la frialdad y la inteligencia del piloto que el año próximo estará en MotoGP subido en la Yamaha del equipo Tech3, pero en el día que menos debía arriesgar con Rins muy tocado por su reciente fractura de clavícula no supo conformarse y le pudieron las ganas.

El resultado fue desastroso para el francés. Con la sanción de 30 segundos no sólo lanzó al aire como si fueran billetes todos los puntos que podría haber sumado en el Gran Premio de Gran Bretaña, sino que además regaló otra posición a Rins para que terminase en séptimo lugar y pudiera recortarle un buen puñado de puntos en la general.

La falta de paciencia de Zarco le deja aún al frente de la clasificación general, pero con una ventaja de sólo 10 puntos sobre Rins. Un enorme globo de aire para el piloto de Sito Pons que podría haber salido de Silverstone con las opciones muy mermadas. Con seis grandres premios por delante la pregunta es ahora si los viejos fantasmas de Zarco han vuelto a aparecer.

Espero que no. No me gustaría ver a ese piloto de acciones imprevisibles y poco acertadas. Ahora es un piloto maduro, pero ¿quién sabe? ¿le estará pudiendo la presión?

Clasificación general de Moto2:

Moto3: el monólogo de Binder

Hace ahora una semana nos preguntábamos en la previa del Gran Premio de Gran Bretaña si Brad Binder pensaba sacar la calculadora aprovechando que todos sus rivales en el campeonato estaban pasando por unas horas muy bajas. La respuesta que ha dado el sudafricano en Silverstone ha sido un no mucho más que rotundo.

De 61 puntos de ventaja que tenía sobre Jorge Navarro antes de llegar a Inglaterra, tras ganar en Silverstone y Navarro terminar por los suelos, Binder ha asestado un golpe sobre la mesa que casi hace saltar la banca con 86 puntos de ventaja. Sólo faltan seis carreras por disputarse, o lo que son lo mismo, 150 puntos. Con semejante ventaja al frente del liderato Binder puede quedarse de brazos cruzados y limitarse a dosificar su ventaja.

Pero no, Binder no es así. El año que viene está en Moto2 con KTM, está en una estructura ganadora con una moto de primera línea, no va a dejar que los cálculos empañen una temporada para enmarcar, en la que hasta en los días muy malos ha demostrado que es un grande, puntuando cuando todo se le ponía en contra y cometiendo sólo un fiasco en Brno cuando lideraba la carrera con mano de hierro.

¿Quién osará disputar el triunfo a Binder en lo que resta de campeonato? Mi compañero Nacho apuesta por Aaron Canet, yo por Jorge Martín. Ahora que el madrileño está más motivado que nunca tras su primer podio en Brno y su fichaje con Gresini puede darnos una sorpresa a final de año.

Clasificación general de Moto3:

Fotos | Ajo.fi, Pons Racing, Ducati Press, Honda Pro Racing
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