Después de unos meses de tregua, el motociclismo volvió a reencontrarse con la tragedia el pasado fin de semana. El piloto holandés Victor Steeman falleció en Portimao durante la primera carrera de Supersport 300, después de un fuerte accidente con José Luis Pérez. Este jueves se ha guardado un minuto de silencio en Australia en homenaje a él y a Phil Read.
Una de las opiniones más perseguidas en Phillip Island era la de Maverick Viñales, que hace un año perdió a su primo, Dean Berta Viñales, en otro accidente en la categoría de Supersport 300. Viñales no se ha cortado en explicado todo lo que opina sobre una categoría que se ha vuelto demasiado peligrosa.
"Son motos que pesan como una MotoGP y tienen unos frenos de mierda"
"Supersport 300 es una categoría inútil. Son motos que pesan 160 kilos, tienen cero velocidad y te encuentras a 30 pilotos en pista. El problema son las motos, que pesan como una MotoGP, tienen frenos de mierda y chasis de carretera. No es culpa de los pilotos, es culpa de la categoría", apuntaba Viñales.
Steeman murió el pasado martes después de tres días de lucha en el hospital de Faro. El piloto holandés cayó durante la carrera del sábado con la mala suerte de que la moto de Pérez le golpeó en la cabeza. Tuvo que ser reanimado dos veces ya en el mismo circuito, le trasladaron en helicóptero al hospital y finalmente falleció.
"La primera vez que llegué a 125 cc si no tenías talento era imposible ganar o seguir a los demás. La primera vez que salí a pista casi salgo por orejas. Me sirvió para aprender cómo y dónde mejorar. En Supersport 300 tienes motos que no pasan de 140 km/h y es imposible marcar la diferencia. Y claro, si alguien se cae delante tuya, no puedes esquivarle", añade.
Dean Berta Viñales, el primo de Maverick, murió después de un accidente muy similar. Se cayó de su Yamaha, quedó en mitad de la pista en plena curva y el grupo perseguidor no pudo esquivarle. "En su momento ya le dije a mi familia que no era una buena categoría, que no le vendría bien correr allí".
En Supersport 300 no puedes marcar la diferencia. El problema es la categoría, no los chicos que corren ahí. De alguna manera, es algo que también está empezando a suceder en Moto3. Hace años esto no sucedía. Si sigue igual van a pasar muchas más cosas, no son motos de carreras, y eso es un problema", concluye.
En Portimao terminó una nueva temporada de Supersport 300, pero cada vez es más evidente que Dorna y el WSBK deben hacer algo con esa categoría, a ser posible ya para 2023.