Si algo hemos podido ver en el Gran Premio de Gran Bretaña es que las Yamaha vuelven a tener las mismas posibilidades que Honda o Ducati de luchar por el título de campeón. Tras diversos desacuerdos en las opiniones de sus pilotos y varias carreras con muchas dificultades, la marca japonesa ha vuelto a mostrarse competitiva en la carrera de Silverstone.
Dos de los escalones del podio fueron ocupados por sus pilotos. La tercera posición fue para Valentino Rossi que lideró prácticamente toda la carrera. La segunda, para Maverick Viñales. El español apostó por una estrategia, que aunque pareciera arriesgada, estaba mucho más que meditada: usar el neumático blando en el eje trasero.
"Me he fiado de nuestras sensaciones"
Maverick Viñales llevaba mucho tiempo sin encontrarse cómodo sobre su Yamaha. En Brno vio la luz con su tercera posición, pero el de Figueras sumaba ya varias citas con muchos problemas y quejas. No subía al podio desde Mugello y no gana desde Le Mans. En Silverstone, Viñales ha vuelto ha reconciliarse con su compañera, y gran parte de culpa la tiene su elección de los neumáticos****.
Mack cambió por completo la estrategia de las últimas carreras, esta vez apostó por empezar con paciencia y tirar a todo trapo al final. Por otro lado y viendo los resultados de las Tech3 en otras carreras anteriores (quedaron por delante de las oficiales en Austria, Alemania, Barcelona y Jerez), Viñales decidió jugar con las mismas cartas y elegir para el neumático trasero la versión más blanda de Michelin.
"Sabía que en las últimas vueltas mi moto iba muy bien, así que estaba tratando de mantener el ritmo y la concentración para salvar los neumáticos hasta el final. Por supuesto, pude hacer buenas vueltas al principio, pero luego el neumático se habría caído mucho. Estaba pensando en hacer otro paso: ir despacio en el principio y empujar al final", explicaba Viñales tras la carrera.
"El duro nos ha perjudicado en muchas ocasiones y con el blando he conseguido ser muy rápido al final de carrera. Es una cosa extraña pero los neumáticos son así, habrá que tenerlo en cuenta. Pensaba que más gente habría ido con el blando como Ducati, pero al final he visto que escogieron el duro y han creado dudas en nuestro equipo. Al final sabíamos que durante todo el fin de semana hemos rodado con el blando, tenía buen grip y me he fiado de nuestras sensaciones", argumentaba el catalán ante las cámaras del Movistar MotoGP.
El de Yamaha, que fue gran parte de la carrera en la tercera posición, siguió la rueda de Andrea Dovizioso para adelantar a su compañero de equipo. Rossi, que había liderado 17 vueltas, no pudo hacer nada para seguirlos. Fue a falta de tres vueltas cuando Maverick intentó dar caza a Dovi. En los últimos virajes el español estuvo realmente cerca, sin embargo, acabó a 0.114 del que ahora es líder de la general. Si la carrera hubiera durado una vuelta más, el ganador habría sido del todo impredecible.
"Estaba atrapando a Andrea en la última vuelta. Fue una de mis mejores vueltas y di todo para atraparlo. Tenemos que estar felices de estar trabajando de la manera correcta otra vez", decía el portador del dorsal 25. Con el cero de Marc Márquez, Viñales se acerca más a la cabeza de carrera, sigue en tercera posición pero ahora a sólo cuatro puntos de el de Honda y a trece de Dovizioso.
Fotos | Movistar Yamaha Racing
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