Jack Miller se quedó compuesto y sin novia en el primer parón de MotoGP. En Mugello lo que le comunicó KTM fue que contaban con él, pero un mes después en Assen se encontró con que ya no tenía sitio en la marca naranja, y tenía un pie fuera de MotoGP. Miller estaba muy enfadado, pero aún hay esperanza para él.
Y es que Miller aún puede quedarse en el mundial. Concretamente, gracias a Ducati. Con Pramac Racing camino de Yamaha, en Borgo Panigale quieren imponer una organización de pilotos que abriría un hueco para Miller en Gresini Racing, heredando la moto que va a dejar libre Marc Márquez cuando vista de rojo.
Aldeguer estará en el VR46, y Rossi tendrá que elegir entre Morbidelli y Di Giannantonio
Jack Miller se puede quedar en MotoGP. Con solo 29 años, siendo el único australiano de la parrilla y además con un carisma especial que le hace tener una fiel legión de seguidores, parecía difícil que Miller no tuviese los apoyos necesarios para quedarse en MotoGP. Y todo apunta a que lo hará sobre una Ducati.
De hecho, Miller es el favorito para pilotar en Gresini Racing la próxima temporada, subido en la moto que dejará libre Marc Márquez. En el equipo italiano Álex Márquez va a seguir la próxima temporada, pero la otra plaza está más disponible que nunca, ya que Ducati ha alterado los planes del VR46.
Con la salida de Pramac, el VR46 heredará la posición de equipo satélite vinculado a Ducati. Y eso tiene ventaja, como disfrutar de las motos pata negra, pero también algún inconveniente, como tener que aceptar pilotos de Ducati. Y eso es exactamente lo que va a pasar. Todo apunta a que Fermín Aldeguer estará en el VR46.
Así que con Aldeguer fijo, el equipo de Valentino Rossi tendrá que elegir entre seguir con Fabio Di Giannantonio, que no es de la academia pero ha cuajado muy bien, o darle una última oportunidad a Franco Morbidelli, pupilo del rancho y amigo personal de Rossi, pero en un nivel de forma cuestionable.
Lo lógico sería que el VR46 apostase por Di Giannantonio, por nivel deportivo y por integración actual del equipo. Eso significaría que Morbidelli se quedaría fuera de MotoGP, y que habría una plaza disponible en Gresini Racing. Esa a la que aspira Jack Miller, aunque fuese con una Ducati Desmosedici GP24 anticuada.
Un negocio redondo también para Dorna, ya que en lugar de quedarse fuera el único australiano de la parrilla lo haría un italiano más de capa caída.