El juego de las sillas ha comenzado antes de tiempo forzado por el movimiento prematuro de Rossi. Después de la renovación del italiano y la salida de Jorge Lorenzo a Ducati, el resto de pilotos tienen que jugar sus cartas para conseguir un buen asiento en 2017. Uno de lo pilotos con más novias es el joven Máverick Viñales.
El actual piloto de Suzuki y ganador del título de Moto3 en 2013 ya tiene de forma reconocida dos equipos oficiales con apuestas firmes sobre la mesa. Uno sería su actual escuadra capitaneada por Davide Brivio, la otra posiblemente sería la futura ex-Yamaha de Jorge Lorenzo.
Tengo dos equipos detrás de mí con los que podría estar en cabeza. Uno es el que me confió en mí cuando estaba en Moto2 y en el que soy y puedo seguir siendo la referencia (en clara referencia a Suzuki). Luego hay otro equipo, que ya está ganando actualmente, así que es difícil tomar una decisión.
Cuando me subo a la moto me abstraigo de todo. Sobre el fichaje pienso en casa, no en el circuito
Yo vine a MotoGP a ganar. Suzuki ha dado un paso adelante increíble en un año y si hacemos un fin de semana perfecto podemos luchar por el podio. Esto me hace pensar mucho y confío mucho en Davide Brivio. Es una decisión muy difícil, honestamente pensaba que sería más fácil decidirme por uno u otro equipo. Pero ahora mismo un día pienso una cosa y al siguiente, otra.
Si veo la clasificación, es fácil, veo a Yamaha primero y segundo pero entonces empiezo a pensar qué necesito y sobre los cambios. Así que por el momento estoy entre dos equipos, pero cambio de opinión cada día. Cada día estoy más convencido de apostar por un equipo, pero todavía no lo suficiente.
Cuando me subo a la moto es otro mundo, me abstraigo de todo. También para mi equipo es importante saber la decisión porque están un poco nerviosos. Pero yo pienso sobre ello en casa, no en el circuito.
Fotos | Suzuki Racing
Más información | MotoGP
En Motorpasión Moto | GP Francia