Bien lo saben quienes han pasado por todo el proceso de sacarse el carnet de moto: no es una tarea sencilla. Pasar por los trámites y pruebas de hasta tres y cuatro exámenes es laborioso, a veces desesperanzador y que además, supone un importante descalabro para las carteras en el caso de suspenso. Eso si no lo pasas a la primera.
En Francia comparten un sistema de carnets prácticamente idéntico al español, que es también extensible a la mayoría de territorios en la Unión Europea. Desde la licencia AM hasta el A y pasando por el A2 entre otras, los costes para sacar el carnet se ha disparado, las colas son eternas y los examinadores no dan abasto. Por esohan adoptado un proyecto de ley para simplificar el acceso a los permisos de conducción.
Otros funcionarios podrán hacer de examinadores, y más ayudas al carnet de moto
En Francia parece que los problemas de sacarse el carnet de moto son también comparables a los que tenemos en España. A los elevados precios por sacarse el carnet hay que sumar también las largas colas que llegan incluso a superar varios meses de espera.
Por ello en Francia quieren poner las cosas más fáciles a quienes vayan a sacarse el permiso. A finales de marzo la Asamblea francesa aprobó un proyecto de ley presentado por el diputado Sacha Houlié con un paquete de medidas bastante jugoso para aquellos que se quieran sacar el carnet de moto, entre otros.
En el texto aprobado en la primera lectura se prevé la creación de una plataforma digital llamada "un joven, un permiso". En ella el gobierno listará todas las ayudas a nivel autonómico, estatal y comunitario a las que puedan acceder todos los candidatos a sacarse el carnet con el fin de hacerlo algo más barato.
Hasta ahora en Francia tenían la Cuenta de formación personal (CPF), que permite financiar la formación profesional , y eso incluye algunos permisos de circulación como el carnet B, el de camión o autobús. Sin embargo, las motos estaban excluidas de esta ayuda a la financiación. Hasta ahora.
El carnet de moto también se utiliza para trabajar, o con motivo de muchas oposiciones. Ya sea de repartidor o necesario para una oposición, ahora los franceses tendrán ayudas para financiar el carnet de moto.
Las largas esperas por la falta de funcionarios y examinadores no es algo que solo ocurre en España. De hecho, en Francia tienen la posibilidad de que otros funcionarios ajenos a los inspectores que examinan (llamados IPCSR) puedan examinar puntualmente si el tiempo de espera es mayor de 45 días. Pero ni con esas consiguen rebajar las oleadas de gente que se quiere examinar.
Ahora directamente quieren ampliar la utilización de personal público funcionario o contra actual (contratado para esa labor) en lugar de esperar a los examinadores habituales para que hagan el examen y de esa manera evitar colas masivas. La idea aquí es responder puntualmente a la escasez de plazas y acortar los plazos de presentación al examen, permitiendo al mismo tiempo que los IPCSR dediquen más tiempo a sus otras labores.