No hay duda de que BMW está teniendo un 2023 lleno de innovaciones. Muestra de ello son las numerosas patentes que los alemanes han ido soltando: asientos calefactables para motos con efectos visuales, asientos retráctiles, una moto eléctrica naked para el A2, y a la larga lista ahora hay que sumar otro artificio que de verdad, podría tratarse de una revolución en el mundo de las motos.
Estamos hablando de que BMW trabaja e investiga la dirección a las dos ruedas en motos, que podría haber la posibilidad a unos cuantos diseños que la fábrica bávara tiene en mente. Así lo demuestra la última patente.
Custom estilo chopper, de alto rendimiento, eléctricas... La idea es para todo tipo de motos
Como venimos viendo en los últimos tiempos, las patentes son la antesala de lo que veremos en las motos en un futuro muy cercano, y que ya hemos comprobado de primera mano cómo muchas de ellas acaban llegando (y otras no). No solo hay determinadas patentes válidas para una sola moto, sino que otras muchas se convierten en ideas para otros fabricantes y abrir el futuro.
Esta es la idea de BMW con su última patente. Cycle World recoge que, a través de tres solicitudes de patentes, BMW ha registrado docenas de soluciones al suministro de tracción y dirección a la rueda trasera en una moto.
Y sorpresa, en sus ilustraciones no solo hay motos de combustión, sino también motos eléctricas y una amplia gama de sistemas para girar la rueda trasera en dirección opuesta a la delantera. La idea es inequívoca: crear un mayor efecto de dirección que el que se obtendría únicamente girando la rueda delantera sea cual sea el modelo.
Si nos fijamos con atención la moto ilustrada es una custom de estilo chopper con una larga horquilla cuyos manillares vuelan hacia la zaga trasera. En verdad, es un juego maestro, porque girar una moto convencional es fácil, pero una chopper no por su reducido ángulo de dirección, larga distancia entre ejes... Son como un barco difícil de maniobrar.
También mencionan la posibilidad de que esto sea aplicable a motos deportivas, de "alto rendimiento" o cualquier otra de su gama prácticamente.
Ahí es donde el nuevo sistema de dirección trasera tendría su función, ayudando a los giros más cerrados. Específicamente la rueda trasera tendría su propio eje de dirección, y a través de sistemas mecánicos eléctricos e hidráulicos.
La explicación de BMW nos termina de ayudar a entender el concepto: "La posibilidad de dirigir ruedas que antes no se dirigían, además de una o más ruedas que ya eran dirigibles, reduciría el radio de giro y las desventajas asociadas o, permaneciendo el radio de giro igual, permitiría ampliar la distancia entre ejes de modo que se pudiera conseguir más espacio de instalación, una dinámica elevada más confortable y más reservas de fuerza lateral en las curvas. Esto reduce el ángulo de giro necesario de la rueda delantera o de la rueda que hasta ahora se dirigía de forma convencional".