El culebrón de la Real Federación Española de Motociclismo (RFME) parece no tener fin. Hace un par de semanas ya estuvimos comentado lo que había ocurrido tras las elecciones ganadas por Manuel Casado, que fueron impugnadas por irregularidades en el censo. Así, Ángel Viladoms se mantenía como presidente en la Comisión Gestora a expensas de una solución.
Pero esa solución no parece llegar. Los afines a Manuel Casado acusaban al actual presidente de paralizar las elecciones en su propio beneficio. Por su parte, el equipo del presidente en funciones salía al paso, afirmando que la denuncia vino por parte de la Federación de la Comunidad Valenciana, es decir, ajena a la RFME.
Sea como fuere, parece que la situación no da para más. En un comunicado enviado por la candidatura de Manuel Casado se acusa de que Ángel Viladoms está tratando de “dar un golpe de estado”. Todo ello motivado, además de por la paralización de las elecciones, a causa de que el actual presidente estaría haciendo lo posible por mantener su sueldo de 86.000 euros anuales a pesar de serlo sólo en funciones.
Varios miembros de la Comisión Gestora recurren al TAD y al CSD
Así las cosas, algunos miembros de la Comisión Gestora de la RFME recurrieron ayer ante el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) y ante el Consejo superior de Deportes (CSD) para denunciar que, según ellos, Ángel Viladoms quiere “concentrar todo el poder de la RFME en dicha Junta Gestora, deslegitimando a la Comisión Delegada y a la propia Asamblea General”.
La principal denuncia es, literalmente, la siguiente:
Ángel Viladoms, pese a encontrarse actualmente como presidente en funciones, quiere aprobar seguir cobrando el sueldo (86.000 euros anuales) del presidente electo y poder decidir sobre los presupuestos, calendarios y todo lo relativo al motociclismo sin el control de la Asamblea General ni de su Comisión Delegada.
Esto viene motivado a los puntos que parecen en la orden del día de la Junta convocada por el propio Viladoms para el próximo sábado, en la que el punto sexto es la “aprobación remuneración del presidente” y, la octava, “el informe presupuesto para 2017”. Además, también quiere aprobar calendarios de los diferentes campeonatos, algo que según el artículo 46 del reglamento de la RFME es potestad de la Asamblea.
Veremos en qué queda todo esto.Quien perderá será el Motociclismo, que podría ver en 2017 cancelados prácticamente todos los campeonatos nacionales de España si no se calman las aguas, puesto que muchas Federaciones Autónomas podrían plantarse y no organizar competiciones. Algo contra lo que la RFME ya nos confirmó que tomaría medidas judiciales en caso de ocurrir.
Fotos | eleccionesmoto2016