Ya vimos en la primera parte de nuestra particular prueba que la anilla de seguridad del Casco Camdalt One resiste lo suyo. Incluso columpiándose colgado de ella. Pero me vuelvo a poner el antifaz de caco, e imagino que es lo siguiente que haría un ladrón. Lógicamente, sería intentar hacer palanca para llevárselo. Pues manos a la obra, entro en el primer “chino” que vea compro un destornillador para hacer palanca, y ya tengo el casco en la saca. Bueno mejor también voy a la ferretería de toda la vida a comprar otro destornillador en condiciones, que con uno de “los chinos” quizás es ponerlo demasiado fácil.
El resultado es bastante positivo. Como era de esperar, la pieza de termoplástico que incorpora el sistema con funciones estéticas y aerodinámicas, y que además oculta dos muelles que evitan las vibraciones y el libre movimiento de la anilla, acaba en bastante mal estado. Pero sigo sin conseguir deshacerme de la dichosa anilla y liberar mi preciado botín. Lo único que consigo haciendo palanca es destrozar la calota del casco. Pero no os preocupéis que voy a la ferretería de nuevo, que ya me conocen incluso con el antifaz puesto.
Ahora si, esta es la definitiva. Con estos alicates de corte la anilla va a romper seguro, y si no es así el señor ferretero muy amable, me ha dado una solución un poco más “Gore”. Dice el fabricante Camdalt que la anilla metálica es de alta resistencia mecánica y a la corrosión, pero esperemos que no sea acero del bueno. Ni cosquillas. Casi me dejo la mano apretando los alicates y parece que lo único que consigo es hacer muescas tanto en la anilla como en la zona de corte del alicate. Y también como podéis ver en la foto nos empleamos a fondo con la pieza de termoplástico. Pero al terminar de cortar esta, aparece de nuevo otro trozo de metal de alta resistencia mecánica que nos impide liberar el sistema.
Esto ya es cuestión de amor propio, voy a dejar de pensar como un vulgar ratero y voy a comenzar a pensar como el amable ferretero. Vamos por la cizalla y la radial. ¿Cómo? que los ladrones de cascos no usan radial. Tú que sabrás, si no has visto ni Ocean’s Twelve. Asustado salí de ver a mi amigo el ferretero, al saber lo que cuesta una buena cizalla corta-cadenas y menos mal que la radial me la dejan prestada. Pero el final esta ya cerca y con la incómoda anilla mordida por la cizalla, este ya no se escapa. Ni que decir tiene que el casco ya lo hemos sacado hace tiempo de la moto, no solo para no dañar esta con nuestras pruebas, sino para impedir acabar detenidos en mitad de la calle. Cerramos la cizalla no si esfuerzo y ¡Zas! La anilla ya se ha roto como podéis comprobar. Ahora hay que hacer otro corte para terminar de sacarla de su alojamiento.
También me puse manos a la obra con la radial prestada, que en pocos segundos terminó con la vida de la dichosa arandela. Estoy seguro que a los amigos de lo ajeno se les ocurrirían mil una formas más de sabotear el sistema pero casi todas nos llevarían a dejar inutilizado el casco para su uso y mucho menos para poderlo vender a alguien con dos dedos de frente. Por lo que el Camdalt One pasa la prueba de robo, con una nota muy alta y mas sabiendo que su precio es de 79 Euros. Esto hace que la compra sea aún más lógica, ya que no va a ser un casco buscado por los cacos por lo elevado de su precio.
Pero no quiero despedirme si dar nuestro agradecimiento a Mikel de Camdalt por dejarnos el casco para la prueba y a mis amigos Gino, Vicente y MSE por colaborar en la misma. Espero que os haya gustado.
En Motorpasión Moto | Intentamos robar el casco, Camdalt One. Primera parte.
Más Información | Camdalt Helmets
Nota: El casco Camdalt One fue cedido para la prueba por Camdalt Helmets. Para más información consulta nuestra política de relaciones con empresas.