Cuando hablamos de récords mundiales de velocidad, es una continua lucha por ver quién hace la moto más grande y loca. Pues hay alguien que ha recuperado una idea tan vieja como el funcionamiento de los trenes de vapor para conseguir su propio récord, pero en moto. Y lo ha conseguido.
Una pareja construyó una moto a vapor que es capaz de llegar a casi 300 km/h, y lo más bizarro de esta historia es que la fabricaron en el cobertizo de su casa, pero muy a lo 'Breaking Bad': con un poco de "principios de la química con la ingeniería de precisión para crear algo que me apasiona: las motos rápidas".
La moto alcanzó una velocidad de salida de 263,61 km/h en 3,878 segundos en 200 metros
¿Puede una moto a vapor funcionar? Aunque ahora nos pilla demasiado lejos, hace un siglo y medio los trenes eran máquinas de vapor que se desplazaban rápidamente gracias a la fuerza del agua que hervía al quemar carbón. Naturalmente la sociedad ha ido avanzando y ha dejado esa forma de movilidad atrás, pero como es obvio, nunca desapareció.
Así que volver a retomar esa forma de movilidad en una moto es todo un juego al que algunos están dispuestos a echar billetes, cabeza y tiempo con el fin de conseguir algún que otro récord mundial.
En este caso se trata de un récord utilizando una fuente de energía humilde y accesible: aceite vegetal y vapor.
Graham y Diana Sykes son abuelos de nueve nietos. Antes de llegar a los 60 tenían el objetivo de conseguir una de las motos más rápidas del mundo, pero a la vieja usanza; nada de modernos propulsores de cuatro cilindros y más de 200 CV. Y es que la edad no es un impedimento para ir rápido.
La historia comienza en el cobertizo de la casa del matrimonio, cuando se propuso combinar "los principios de la química con la ingeniería de precisión para crear algo que me apasiona: motos rápidas", pero de una manera "más sostenible para el planeta" para demostrar "que no hay que renunciar a la velocidad, solo ser creativo".
Y vaya que si lo consiguieron. A la moto la llamaron "Force of Nature" (fuerza de la naturaleza). En su interior no funciona como un tren a vapor como tal, ya que no genera vapor a alta presión para accionar un pistón, sino que utiliza aceite vegetal de cocinar reutilizado para convertir agua sobrecalentada en vapor.
De locos. El vapor sale por unas toberas situadas en la parte trasera de la moto y la impulsa dejando atrás una instantánea nube de vapor de agua. Casi no da tiempo a verlo salir de la meta.
Total, que la moto ya ha llegado a los 289 km/h, pero eso no le ha valido para el récord oficial. La moto alcanzó una velocidad de salida de 263,61 km/h en 3,878 segundos en 200 metros.
Alcanzaron los 289 km/h justo después de los 200 metros, "pero eso no cuenta para el récord", dice el inventor, que tiene formado un equipo explícitamente para el grupo. "Así que ahora somos oficialmente la moto de vapor más rápida del mundo", y eso no es todo, sino que "queda mucha potencia por llegar y correremos más rápido en los próximos meses".