Con un pie fuera de Ducati y a falta de que se haga oficial el anuncio de su fichaje por otra marca para 2020, Álvaro Bautista sigue sin tener demasiada suerte en la segunda mitad de 2019, dando por finalizados antes de tiempo los dos días de entrenamiento que el Campeonato del Mundo de Superbikes tenía programados en Portimao.
El circuito portugués será precisamente el escenario de la primera carrera tras el parón veraniego, y allí el toledano se ha dado cuenta de que su hombro aún está lejos de haberse recuperado de la lesión sufrida en Estados Unidos.
"Mi relación con Ducati tendrá un punto y aparte a finales de 2019"
Buatista trató de seguir trabajando en Portugal de cara a la próxima carrera que se celebrará en el mismo circuito de Portimao dentro de dos fines de semana. Con unos márgenes tan ajustados el piloto de Talavera de la Reina pensaba estar mucho más recuperado, pero al probarse sobre la pista lusa se ha dado cuenta de que su hombro aún sigue maltrecho.
"No tengo el hombro perfecto aún y siento un poco de dolor. No puedo tirar fuerte", aseguró el piloto de Ducati. La caída en Laguna Seca le produjo un estiramiento en los ligamentos de su hombro izquierdo, una lesión que sana de manera lenta y que le impide hacer un uso normal de sus capacidades físicas, además de ser bastante incómoda.
Durante la primera de las dos jornadas de test, Bautista rodó un total de 66 vueltas, pero en el segundo día apenas dio unos pocos giros en su Panigale V4 R antes de dar por concluido el programa de trabajo para no estresar en exceso su hombro y enfocarse a la recuperación total antes de la carrera.
"He preferido parar pronto para no empeorar las cosas", apuntó Bautista. "Prefiero estar en mejores condiciones dentro de dos semanas. En cualquier caso hemos hecho muchas vueltas y estoy contento porque vuelvo a encontrarme bien sobre la moto. Es la primera vez que me subo en la moto desde Laguna Seca y aún me quedan unos días para recuperarme por completo".
Bautista también adelantó que para la próxima carrera iba a prepararse con un entrenamiento más suave para no sobrecargar el hombro y que, del mismo modo, enfocará el fin de semana dando menos vueltas de lo normal para "llegar lo más fresco posible a las carreras". Al final de los dos días con el mejor tiempo de 1'42.087 conseguido el primer día, Bautista cerró los entrenamientos en novena posición de la combinada.
Preguntado sobre su salida de la que es su actual marca, el propio Bautista ha admitido que "a finales de 2019 mi relación con Ducati tendrá un punto y aparte". Es cuestión de días que su fichaje por Honda se revele, una marca con la que guarda buena relación desde su época juntos en MotoGP y que le habría propuesto una moto revolucionaria con la que optar al triunfo en 2020.