Fue en octubre de 2024, hace tan solo unos meses, cuando el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, entregaba a la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil una remesa de chalecos airbag para los motoristas de la Benemérita.
Han pasado cuatro meses y las asociaciones de guardias civiles ya están denunciando "fallos" y exigiendo "soluciones" porque llegan con "defectos en la distribución" como "accionamientos incorrectos sin motivo aparentes".
No son uno ni dos los casos registrados: AEGC y JUCIL denuncian varios fallos, hasta en marcha
Primero fue el director de la DGT, Pere Navarro, que avisó que quería universalizar el uso del airbag en los motoristas. Para todos. Y qué mejor que empezar haciéndolo por la Guardia Civil. En marzo del 2024 llegó la adjudicación: 4.660 chalecos por 2,5 millones de euros.
En el documento de adjudicación se detallaba que estaban desarrollados por Fecsa y, entre otras cosas, que estaban diseñados para cumplir con los dos requisitos del contrato del Ministerio del Interior: que se activen autónomamente sin cableado y que su peso no supusiera una carga para los motoristas.
Desde entonces ya son bastantes los agentes que los llevan puestos (no todos, ni por asomo). Cuatro meses después, no ha sido una, sino dos, las asociaciones de guardias civiles que han denunciado defectos en los chalecos mientras sus agentes prestaban servicios.
🗞BUENAS NOTICIAS❕
— AEGC Guardia Civil 🇪🇸 (@AEGCnacional) December 3, 2021
😎 NUEVO CHALECO AIRBAG PARA L@S MOTORISTAS DE LA AGRUPACIÓN.
Recordamos que desde #AEGC llevamos años reclamando este tipo de protección para nuestros Ángeles del asfalto🛣.
Desconocemos cuando se comenzará su distribución. @AEGCtrafico @DGTes#FECSA pic.twitter.com/EzlyfZz5cU
Primero fue la Asociación Española de Guardias Civiles. AEGC dice haber tenido "conocimiento de los fallos registrados" en dichos chalecos. Concretan "varios casos" en los que los chalecos se activan "sin ningún motivo cuando están circulando" y que gracias a la pericia de los agentes, "les permitió detener las motocicletas con seguridad tanto para ellos como para el resto de los conductores".
De otra manera, que un chaleco airbag explote en marcha puede suponer un susto y sobresalto que acabe en caída. Evidentemente, se supone que solo han de activarse cuando detecta un movimiento brusco gracias a un conjunto de sensores y un algoritmo que analiza los movimientos del piloto en tiempo real. Eso entraba en la licitación de Interior, y no los típicos airbags que van amarrados a la moto y que se activan cuando el motorista se desliga de la moto.
Por otra parte, la denuncia de JUCIL. Estos segundos detallan, "al menos un caso en el que parece ser que el airbag no se activó durante el accidente, dejando desprotegido al agente. En un suceso reciente ocurrido en la autovía A-6, un guardia civil sufrió un accidente y su chaleco no respondió".
También hablan de ser "conocedores" de seis casos en los que el airbag se desplegó sin motivo aparente, "generando serias dudas sobre su fiabilidad" porque, dicen, en cuatro de esos casos, los airbag registraron activación, pero en dos no quedó constancia, "lo que sugiere posibles fallos técnicos graves".
La Dirección General de la Guardia Civil (DGGC) ya tiene conocimiento de estas exigencias. Qué es lo que pasará ahora: piden no solo que se esclarezcan estos fallos, sino que se realice una revisión exhaustiva de cada uno de los chalecos distribuidos a los motoristas para identificar posibles defectos.
Eso, además, viene recogido en el pliego de licitación con un control de calidad: "La cesión de un equipo airbag de activación electrónica, de iguales o superiores características, durante la duración de dicha reparación. Caso de no ser posible la reparación, éste será sustituido por uno nuevo de características iguales o superiores al averiado".
Imágenes | AEGC, DGT