Tecnología y motos van de la mano, cada vez más. Con el desarrollo de las motos eléctricas, las posibilidades de incluir tecnología se están disparando. Y posiblemente una de las mejor equipadas hasta la fecha es la recién presentada Verge TS Ultra, en su última versión.
A grandes rasgos, es el culmen de la tecnología en moto, lo más parecido a un Tesla con dos ruedas. La novísima versión estrena hasta seis cámaras ("la moto que ve", dice su CEO), un radar y hasta Inteligencia Artificial para funcionar.
Su precio llega a los 80.000 dólares
La Verge TS es aquella moto eléctrica 'sin rueda' trasera que es salvajismo puro y duro. La marca tiene tres versiones distintas de la moto, la estándar la Pro y la Ultra. Esta última fue anunciada hace no mucho, y es una moto eléctrica de altos vuelos: 201 CV, 1.200 Nm y casi 400 km de autonomía.
Aprovechando el CES de Las Vegas, una de las ferias de tecnología más grandes e influyentes del mundo, los vehículos allí tienen cierto protagonismo. Las motos también. Lo primero por lo que destaca esta moto es por su curiosa rueda, que aguarda dentro de la rueda trasera sin buje.
Posiblemente es la moto de producción más futurista que existe en este momento. Seguramente sea también la que lleve la seguridad y tecnología a un nivel superior, y tiene el título a la primera moto "equipada con sentido de la vista".
Ni una, ni dos, ni tres, sino seis cámaras para cubrir todos los ángulos de visión posibles de la moto. Al estilo Tesla, pero en dos ruedas. Con ellas, la moto puede ver en todo momento y grabar lo que sucede. Juega con un radar de alta resolución y un sistema o centralita con Inteligencia Artificial que gestiona ambos.
El software de cámaras recibe el nombre de 'Starmatter Vision', y su única labor es enterarse de todo lo que sucede alrededor de la moto, como un Tesla. A través de una intuitiva pantalla y de un vistazo, avisa al conductor del ángulo muerto, por ejemplo.
La primera moto con sentido de la vista se aprovechará de algunas funciones que ya hemos visto en otras motos y coches, como el control de crucero adaptativo, prevención de colisiones y asistencia para salir de carril.
Lo curioso de todo es cómo avisa al conductor. Y es que la moto no tiene una, sino dos pantallas. Una en el depósito y otra en el manillar, esta última como la de toda la vida. En la pantalla del depósito se puede ver información del tráfico, gráficos, y una larga lista de opciones y avisos que cubre el sistema Starmatter Vision.
Su precio es prohibitivo. Hablamos de que la compañía finlandesa comercializa su última versión por la friolera de 80.000 euros. Pero lleva cámaras e IA.