El motor de la Yamaha de MotoGP está dando mucho que hablar en los últimas días. Después del test de Misano en el que las motos de 2023 pisaron el asfalto por primera vez, Fabio Quartararo y Franco Morbidelli se mostraron entusiasmados con la potencia del nuevo propulsor. Pero Yamaha podría no parar ahí.
En una reciente entrevista con la web oficial del mundial, Kazutoshi Seki, el jefe del proyecto de Yamaha en MotoGP, ha hablado abiertamente de la posibilidad de dejar atrás su motor de cuatro cilindros en línea para unirse al V4 que utiliza toda su competencia. Eso sí, de momento no le ven mayores beneficios.
Yamaha tendrá el único motor en línea de MotoGP en 2023
Con la salida de Suzuki de MotoGP al final de la presente temporada, Yamaha quedará como la única marca que utiliza un motor cuatro en línea de toda la parrilla. Un tipo de propulsor histórico de Yamaha, que permite una moto mucho más suave, pero carece de velocidad punta en recta para competir con las V4.
"Yamaha ha probado la moto de 2023 y creemos que puede ser competitiva. Todavía hay mucho espacio donde podemos trabajar con un cuatro en línea, pero si pensamos que otra arquitectura de motor nos puede ofrecer más beneficios que el cuatro en línea, sí lo consideraríamos", explicaba Seki en el vídeo en MotoGP.com.
Y es que MotoGP ha cambiado mucho en los últimos años. Suzuki ha demostrado que se puede hacer un motor cuatro en línea con una buena velocidad punta, pero Ducati también ha sido capaz de hacer un motor V4 que sea el más rápido de la parrilla y además no impida que la moto gire casi igual de bien que una Yamaha.
"Entendemos lo que los pilotos siempre quieren de la moto tener la velocidad máxima, pero ahora es muy difícil ganar con una moto con el mismo concepto porque los otros fabricantes porque son muy, muy fuertes. Intentamos tener un buen equilibrio entre la máxima potencia del motor y un carácter suave", concluía Seki.
Lo cierto es que desde que Michelin introdujo sus nuevos neumáticos en 2020, que potenciaban el paso por curva, las motos con motores en línea siempre han ganado, tal y como se podía predecir. Lo hizo Suzuki en 2020, Yamaha en 2021 y, de momento, Quartararo también lidera en 2022. Pero también es evidente que Ducati ya es la mejor moto de la parrilla.
Yamaha está en una encrucijada: seguir siendo la única marca distinta al resto o ceder ante el poderío del V4. Veremos qué camino se toma en Iwata.