Ni un año. La aventura de Stefan Bradl en el Campeonato del Mundo de Superbike ha terminado sin ni siquiera concluir una temporada completa. El alemán llegó al WSBK como líder indiscutible para llevar de vuelta a la Honda CBR1000RR Fireblade hacia la victoria pero lo que se ha encontrado es algo muy distinto.
Este próximo 2018 Bradl se va a quedar fuera de las carreras, porque se le han acabado el tiempo y las opciones para adjudicarse un asiento. Ahora, sin haber cumplido aún los 30 años, el piloto alemán se mantendrá en Honda, pero como piloto de pruebas para MotoGP.
Bradl quiere seguir los pasos de Kallio para conseguir un asiento en MotoGP
Con un décimo cuarto puesto en la general y 67 puntos ha sido una temporada decepcionante. Ha intentado convencer a Honda de que implicara de manera oficial a HRC en el proyecto de Superbike (recordemos una vez más que aunque parezca un equipo oficial, el Ten Kate no cuenta con apoyo directo de fábrica) para remediar la falta de competitividad de la Fireblade y perderse el final de temporada por lesiones, se ha quedado sin asiento en 2018.
Recientemente se confirmaba que el Red Bull Honda WorldSBK tendrá una renovación casi completa de su estructura para 2018, con Leon Camier como jefe de filas y fichando al joven americano Jake Gagne como piloto a tiempo completo cuando Bradl pospuso su firma sobre el contrato para 2018 viendo la falta de potencial del proyecto y el escaso compromiso de Honda.
Quizá parezca un paso atrás en la carrera del Campeón del Mundo de Moto2, pero puede haber sido la solución más acertada. En lugar de estancarse en un proyecto de WSBK que podría no llevarle a ninguna parte, Honda le ha ofrecido ser desarrollador de MotoGP, manteniéndose en las altas esferas del motociclismo y siguiendo los pasos de Hiroshi Aoyama y Casey Stoner dentro de la marca del ala dorada.
Además, Bradl sigue queriendo correr. El piloto de sólo 28 años mira a un ejemplo muy claro: Mika Kallio. El finlandés también salió de MotoGP por la puerta de atrás, pero su vinculación con KTM, el magnífico trabajo de desarrollo que está llevando a cabo con la RC16 y los grandes resultados en sus apariciones como wild card le colocan de nuevo en el punto de mira. Incluso se rumoreó la posibilidad de que reemplazase a Bradley Smith como piloto del equipo oficial austriaco.
Quién sabe si de aquí a poco tiempo volvemos a verle en la parrilla de MotoGP, desde luego que si quiere conseguir su regreso este puede ser el mejor camino. Además, siendo alemán Dorna puede abrirle muchas puertas por aquello de los intereses comerciales en uno de los países más importantes del mundo si el proceso de recuperación de Jonas Folger le deja fuera de juego.