Faltaba la guinda final al pastel: el anuncio oficial, la confirmación, por parte de Ducati sobre el fichaje de Marc Márquez. Y ya está aquí: el piloto de Cervera ya es, a todos los efectos, piloto del Lenovo Ducati de cara a la temporada 2025. El anuncio está hecho.
Borgo Panigale ha sellado el acuerdo que subirá al ocho veces campeón del mundo a la Desmosedici GP25 el año que viene. No había mucha duda al respecto después de que Jorge Martín fichase por Aprilia el domingo después de Mugello.
Contrato bianual para las temporadas 2025 y 2026
Era el anuncio que todo el mundo esperaba desde hace meses: el sustituto a Enea Bastianini, el futuro compañero de Pecco Bagnaia, la nueva pieza que marcaría el futuro de la fábrica italiana y de MotoGP en los próximos años. Y tras un drama digno de una telenovela, Ducati ya lo ha oficializado.
Marc Márquez y Ducati ya son uno. El contrato se ha rubricado, tal y como anunciamos hace unos días. Ha sido esta mañana de miércoles cuando el equipo oficial de Borgo Panigale ha dado la bienvenida al 93: "Marc Márquez se unirá al Ducati Lenovo Team por los dos siguientes años junto con Pecco Bagnaia para las temporadas 2025 y 2026".
Los contratos bianuales gustan a Ducati, y es lo más obvio. Márquez pasará dos temporadas, confirmado por la marca, a bordo del equipo oficial. "Bienvenido, Marc".
🚨 HERE WE GO: it's now OFFICIAL! 🏁
— Ducati Corse (@ducaticorse) June 5, 2024
@marcmarquez93 will join the #DucatiLenovoTeam on a two-year deal alongside @peccobagnaia for the 2025-2026 seasons! 🙌🏻
Benvenuto, Marc! #ForzaDucati pic.twitter.com/s2OOaXpJm8
Había pocas dudas, pero hasta que se ha hecho oficial, se han escrito ríos de tinta sobre su posible destino final. Al final, el despojado ha sido Jorge Martín, que soñaba con vestir de rojo tras cuatro años en un satélite. El español lo había rozado con los dedos, y de hecho, entre Barcelona y Mugello, los italianos ya habrían dado la bienvenida a Martín a la fábrica oficial.
Sin embargo, a última hora, Ducati se echó atrás tras la negativa de Marc de recalar en otro equipo satélite. El de Cervera quería una moto oficial, y oficialmente, ya la tiene. Su debut, a todas luces, será en los test de Cheste, en noviembre, al término de la temporada.
"Estoy muy contento de poder vestir los colores rojos del equipo oficial Ducati en MotoGP la próxima temporada. Desde el primer contacto con la Desmosedici GP, disfruté pilotándola y me adapté bien enseguida. Desde ese momento, supe que mi objetivo era continuar este camino, seguir creciendo, y pasar al equipo donde Bagnaia ha sido campeón del mundo durante dos años consecutivos. Estoy feliz de poder dar este gran paso en 2025 y agradecido por la confianza que Ducati ha depositado en mí", decía el 93 en el comunicado.
"Por último, quiero dar las gracias a Nadia (Padovani), Carlo (Merlini), Michele (Masini) y a toda la familia de Gresini Racing por abrirme las puertas de su equipo en un momento delicado de mi carrera. Ahora, seguiremos divirtiéndonos y dándolo todo en lo que queda de la actual temporada, que es mi prioridad en estos momentos", sentenció.
Marc Márquez ha ganado la batalla por las motos oficiales. Su órdago ha surtido efecto. Sus resultados esta temporada han ayudado a tomar la decisión; las sucesivas remontadas en Le Mans y Montmeló han puesto al 93 en una muy buena posición.
Ahora la dupla ganadora Márquez-Bagnaia se enfrenta a otro problema: no desestabilizar la "hegemonía" que reina en el box rojo. O eso dijo Pecco Bagnaia. Por el momento, en este dominó se van moviendo fichas, y todavía quedan unas cuantas por caer. Pero las dos más importantes ya tienen su hueco.